Todas las partes han cumplido con el guion previsto. Durante la sesión de control al president de la Generalitat, Inés Arrimadas y Quim Torra se han vuelto a enganchar, y de lo lindo, por la cruzada contra los lazos amarillos de Ciudadanos, después de que el president haya desobedecido la orden de la Junta Electoral Central de sacar la simbología a favor de presos y exiliados de los edificios públicos.

Con su acidez y desprecio habituales, la líder de Ciudadanos en el Parlament ha arrancado con un "¿qué parte de 'retire la propaganda separatista' no entiende?". Y ha seguido con la escalada verbal acusando a los independentistas de ser "muy gallitos en esta cámara, pero después, ante los jueces, no vean cómo se vienen abajo, pasándose el muerto unos a otros".

Como ya es tradición, Arrimadas ha exhibido un par de fotografías, esta vez, la fachada del Palau de la Generalitat con la pancarta y el lazo amarillo, por si acaso Torra no la tenía bastante vista. La todavía jefa de la oposición ha gritado al president: "Ustedes no pueden pedir a los ciudadanos que paguen impuestos y después hacer lo que les da la gana cobrando un pastizal". Arrimadas ha reservado un cartucho para el síndic de greuges, a quien ha calificado como "el procesista mayor del reino", a raíz del informe que Torra le ha encargado sobre qué respuesta dar en relación a los lazos.

El president de la Generalitat ha preferido tirar de ironía en su réplica. "Echaremos de menos su sonrisa y sus cartelitos", ha respondido a Arrimadas, que dejará el Parlament de Catalunya en las próximas semanas por acompañar a Albert Rivera en el Congreso de los Diputados. Torra ha persistido en la actitud desafiante que ha adoptado con la JEC, afirmando que "yo no prohibiré nunca nada". A su vez, ha puesto de manifiesto que "el hecho de que consideren que los lazos amarillos son símbolos políticos" implica que "están aceptando que tenemos presos políticos". Ha sido en este momento preciso que Arrimadas se ha girado hacia su escudero, Carlos Carrizosa, haciendo el gesto con el dedo de estar loco, en una clara alusión al president de la Generalitat. (Es el minuto 3:40 del vídeo adjunto a continuación).

PSC y comuns presionan con la cuestión de confianza

Miquel Iceta y Jéssica Albiach han coincidido en denunciar la inacción del ejecutivo Torra. Tanto el PSC como Catalunya en Comú han aprovechado la sesión de control al president para insistir en lo que ya vienen pidiendo desde hace semanas, que se someta a una cuestión de confianza para comprobar si todavía cuenta con el apoyo del Parlament para seguir gobernando.