La detención de Ignacio González en la operación contra la corrupción en la empresa pública de aguas Canal de Isabell II de Madrid no ha sido la única polémica que ha salpicado al expresidente de la Comunidad de Madrid y número dos y mano derecha de Esperanza Aguirre durante muchos años.

Esta, pues, no es la primera vez que González será investigado por la policía. Ya lo hicieron en 2011 por el uso de un ático de lujo en la urbanización Alhambra Golf de Guadalmina, en Estepona, pero, según la Dirección General de la Policía, esta investigación no había sido ordenada por la autoridad judicial, motivo por el cual unos meses más tarde abrieron un expediente disciplinario al comisario jefe de la comisaría local de Marbella.

Sin embargo, y después de varias investigaciones, el expresidente de la Comunidad de Madrid fue citado a declarar en calidad de investigado en 2016 en una nueva entrega de la saga de presunta corrupción que envuelve a algunos miembros del Partido Popular. Según el juez, González podría haber incurrido en los delitos de soborno y blanqueo de capitales.

La sospecha giraba entorno al hecho de que él aseguraba haber comprado el ático en el 2012 por 770.000 euros, y decía que, hasta entonces, lo había alquilado por 2.000 euros mensuales, pero la policía sospechaba que siempre había sido de su propiedad. El vendedor del ático era la sociedad Coast Investors y la policía estaba convencida de que la utilizaba como sociedad pantalla.

De hecho, en una conversación grabada en 2015, González hablaba con dos comisarios de la policía, entre ellos, José Manuel Villarejo, y les pedía que no se hiciera pública la información sobre que él era el propietario de una empresa pantalla radicada en los Estados Unidos. Una empresa que, curiosamente, tenía un ático de lujo en Estepona.