"Todo lo que está pasando se hubiera evitado si Puigdemont hubiera convocado elecciones y no se hubiera declarado la independencia". Así ha respondido el candidato del PSC, Miquel Iceta, a la secretaria general de ERC, Marta Rovira, que en un tuit le ha reprochado que "qué fácil es bailar cuando tu adversario político Junqueras está en la cárcel". Después de otras acusaciones de frivolidad, el primer secretario socialista ha replicado este jueves en una rueda de prensa en la agencia EFE: "Frívolo es hacer responsables a los otros de decisiones que tú has tomado. Yo ni declaré la independencia ni soy juez. Frívolo es no saber cuántos parados hay en nuestro país". De esta forma se ha referido a la situación en que se encontraron tanto Rovira como Inés Arrimadas el pasado domingo en el programa Salvados.
El cabeza de lista del PSC también ha contestado a Xavier Domènech, líder de Catalunya Comú-Podem, quien este miércoles criticó que "votar a Iceta es votar a Arrimadas". También este miércoles, durante los actos de la Constitución en el Congreso, Albert Rivera le dijo a Pedro Sánchez que le debía una investidura. "Son consignas de campaña. Yo también podría decir que votar a Domènech es votar a Puigdemont", ha afirmado. "No tenemos ninguna deuda con Ciudadanos; la única deuda que tenemos es con los ciudadanos de Catalunya", ha insistido.
Miquel Iceta también ha explicado cuáles serían las tres primeras cosas que haría si fuera investido president de la Generalitat. En primer lugar, convocar a los agentes económicos y sociales para hacer un pacto por el crecimiento y la creación de empleo. En segundo lugar, hablar con Mariano Rajoy y pedirle "horas" para "revertir" la falta de diálogo. Finalmente, también llamaría al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, para "decirle que Catalunya ha cambiado de rumbo y ya no será un problema, sino un estímulo".
El candidato del PSC ha insistido en que no formaría parte de un Govern si no es investido president. En este sentido, ha señalado como ejemplo fórmulas alternativas, como la del País Vasco, donde el PNV gobierna en coalición con el PSOE, pero los socialistas no están dentro del ejecutivo de Íñigo Urkullu.
"Nuestro objetivo es ganar las elecciones", ha defendido. "Siempre lo es, pero con unas encuestas que dicen que cuatro partidos nos disputamos el primer lugar, con un millón de indecisos, este tiene que ser nuestro objetivo". Sobre un posible acercamiento a los comuns, les ha reprochado la ruptura del acuerdo en el Ayuntamiento de Barcelona y ha lamentado que "muchas veces hemos visto su estrategia subordinada a los partidos independentistas".
Iceta también ha presentado un decálogo de cómo ejercería la presidencia de la Generalitat, como que sería sincero y no escondería los problemas, que respetaría la legalidad, que haría una política pragmática, que tendría la "cordialidad como estilo" o que sus banderas serían el catalanismo y la justicia social.