La presidenta del grupo parlamentario de la CUP, Mireia Boya, ha defendido la convocatoria de una huelga general después del encarcelamiento de los dirigentes de la ANC y Òmnium Cultural, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart. Una huelga que "podría ser de forma indefinida hasta que no liberen a los dos presos políticos que han secuestrado y tienen presos en Madrid", ha asegurado la diputada de la izquierda anticapitalista este martes en declaraciones a TV3.

La diputada de los cuperos, que ha defendido a la vez que está en manos de la ciudadanía decidir cómo serán las movilizaciones, ha asegurado también que después del encarcelamiento de Sànchez y Cuixart, "el diálogo ya es imposible". Ha abierto la puerta en todo caso a la mediación internacional porque "el conflicto se ha agravado de una manera importante".

Además, la parlamentaria cupera ha insistido en que no está cerrado porque aún se podría celebrar otro pleno en el Parlament y, a pesar de los "15 días de retraso" desde el 1-O, ha asegurado que ya existen las "condiciones necesarias para proclamar la república". La fórmula, en abierto. "No tiene por qué ser con una votación", ha añadido en la misma entrevista.