Mientras las izquierdas catalanas se tiraban los platos a la cabeza, en lugar de tejer alianzas, él lo tenía claro: se tiene que votar. Fue durante el turno de preguntas de la conferencia "L'esquerra en la cruïlla", organizada por la Universitat Progressista d'Estiu de Catalunya (UPEC). "El derecho de autodeterminación es un derecho democrático que tienen las naciones. Catalunya es una nación y tiene que ejercerlo", recordaba a Núria Parlon (PSC), Xavier Domènech (ECP), Marta Rovira (ERC) y Anna Gabriel (CUP).

El hombre continuó: "Frente a unos que no quieren que se vote y frente a otros que quieren votar, nosotros no somos neutrales". Y añadió en este sentido: "Los demócratas no somos neutrales: tenemos el derecho de expresarnos". Según dijo, él irá a votar "desde una posición internacionalista, sin ser muleta del PDeCAT, intentando ligarlo con una serie de medidas sociales y económicas para los sectores más golpeados por las políticas neoliberales".

"Además, quiero ser ciudadano de una república y no súbdito de una monarquía impuesta por la dictadura", concluía el hombre. Consiguió arrancar un fuerte aplauso del auditorio de la sede de Comisiones Obreras en Barcelona.