Hacienda sigue reduciendo cada vez más las opciones catalanas de su atención al ciudadano, tanto a través de manuales prácticos como telefónicamente. Si hace unos meses ya eliminó el catalán de dos modelos de pago del IVA por "razones de economía y oportunidad", ahora se ha añadido el manual práctico para hacer la declaración de la renta, que ha dejado de estar disponible en esta lengua, a diferencia de años anteriores. También se ha suprimido la posibilidad de ser atendido en catalán telefónicamente.

Así pues, el catalán ha desaparecido del apartado de los manuales prácticos para hacer la declaración de la renta. Actualmente, cuando el usuario abre el apartado de 'Manual práctico de Renta y Patrimonio 2016' encuentra un manual escrito íntegramente en castellano, cuando los años anteriores se había publicado en catalán en la versión catalana y en castellano en la castellana.

Tampoco se da la posibilidad de ser atendido en catalán para hacer consultas sobre la renta telefónicamente. El número de información que ofrece la Agencia Tributaria, no da la opción de ser atendido en catalán en su locución inicial, ni tampoco la proporcionan una vez se es atendido y se le pide al agente en cuestión cambiar de idioma. Además, no dan ninguna posibilidad de ser atendido por un profesional catalanohablante y, únicamente, proponen volver a llamar por si, aleatoriamente, sale un agente que hable en catalán.

Eso sí, el trámite de la lava se puede seguir haciendo en catalán y el borrador se envía al cliente en catalán si así lo solicita el contribuyente, en la mayoría de los casos. Sin embargo, la Plataforma per la Lengua denuncia que algunos ciudadanos catalanohablantes "todavía reciben los borradores de Hacienda en castellano, así como sus comunicaciones y notificaciones, aunque en muchos casos han pedido explícitamente que quieren hacer uso del catalán".

La ONG del catalán denuncia que este es un "trato desigual a los hablantes de las diferentes lenguas" del Estado y critican que los catalanohablantes se encuentren en obstáculos para hacer uso de la lengua en los trámites más comunes de Hacienda.