El sociólogo y profesor de la universidad de Berkeley, Ramón Grosfoguel, ha asegurado que "la sociedad catalana no aceptará la rendición". También ha considerado que actualmente el procés tiene una falta de liderazgos y estrategias, que apuntan a objetivos diferentes.

En una ponencia en la Universidad de Barcelona organizada por la ANC, Grosfoguel ha hecho un llamamiento a aplicar la desobediencia civil pero ha alertado de la necesidad de tener "un objetivo concreto" y "saber qué se quiere". Para el profesor, los objetivos de la desobediencia civil tienen que interpelar la transversalidad del movimiento. "Se tiene que mantener el espíritu del 1-O y luchar conjuntamente por el objetivo compartido, sin peleas partidistas estériles," ha dicho.

Esta desobediencia, dice al poniente, tiene que ser dinámica, inteligente, organizada y noviolenta, para conseguir por Catalunya "una solución digna". También ha animado a la ciudadanía a activarse en función de sus habilidades. "Dividámonos los trabajos para ser más eficientes", ha propuesto, sin esperar que "todo nos venga dado por los partidos".

"Se trata de continuar la resistencia activa, no de reagruparse, rendirse y esperar 15 años más fines que el movimiento sea más fuerte". Eso llegará, ha asegurado, si la lucha es no violenta.

Grosfoguel ha manifestado que el caso catalán tiene dos acontecimientos que duran para siempre, el 1 y el 3 de octubre. "Mientras tanto, el Estado español y los partidos del régimen mantienen instituciones que se comportan como en el tiempo del franquismo y la UE cierra los ojos", ha señalado.

Para confrontarlo, propone abandonar las diferencias políticas y formar un frente unido de liberación. Así se podrá hacer frente a un estado el presidente en funciones del cual "no ha sido capaz de llegar a pactos" en un Estado donde "han caído las caretas".

"Incluso Podemos es un defensor del reino. Si se quiere ejercer la desobediencia civil, es imprescindible conocer el panorama político. Y no nos engañemos. Cualquier partido que apruebe la opresión, el artículo 155, es un partido de extrema derecha", ha concluido -contundente- Grosfoguel.