Decenas de personas se han manifestado este viernes por la tarde por las calles del centro de Barcelona para pedir la dimisión de la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau. La marcha, que según la Guàrdia Urbana, ha concentrado a 125 personas, 300 según otros cálculos, ha obligado a cortar el tráfico por las calles donde pasaban los manifestantes. Los concentrados han gritado repetidamente "Fuera Colau".

Los manifestantes respondían al llamamiento de grupos autollamados anti-Colau que se han gestado en las redes sociales y recogen el malestar de vecinos por las decisiones de la líder de Barcelona en Comú con respecto a la movilidad o el urbanismo. Entre los aspectos más criticados está el rediseño de calles con colores e indicaciones que consideran de muy difícil comprensión.

Según los concentrados, la implantación de las supermanzanas ha fracasado y se ha realizado sin consenso, y el urbanismo táctico en forma de bloques de hormigón y pintura que reduce carriles de circulación es inseguro.

La manifestación ha empezado hacia las cinco de la tarde en la calle Aragó con paseig de Gràcia y ha continuado por Pau Claris y Via Laietana hasta la plaça Sant Jaume. Durante el trayecto, que ha durado una hora, los manifestantes han coreado consignas pidiendo a la alcaldesa que dimita.

Todo eso ha pasado cuando Colau ha dejado Twitter, para no tener que escuchar los reproches que algunos le hacen. Lo anunció recientemente en un comunicado colgado en sus perfiles de Twitter, con un último tweet, y en Facebook e Instagram, que sí mantendrá. "Creo que Twitter hoy no me ayuda a hacer buena política y lo dejo. Seguiré en otras redes menos polarizadas y menos aceleradas", dejó escrito.

De hecho, Colau hacía un mes que estaba alejada de la red social del pajarito azul, después de regalarse unos días de descanso por su cumpleaños, que celebró a principios de marzo. Un paro que ahora define de "prueba piloto", y que ha sido un "éxito". "Hay gente próxima que me decía: "¿Tú estás loca? Con casi un millón de seguidores y dedicándote a la política... ¡No puedes dejar Twitter! No obstante, he llegado a la conclusión contraria: precisamente porque intento hacer buena política, dejaré Twitter", argumentó.

En este sentido, la alcaldesa negó que se marchara de Twitter con el fin de evitar que se la critique, le pregunten cosas o le lleven la contraria, lo que asegura que "no sólo no me molesta, sino que acepto y me gusta". Por el contrario asegura que lo hace porque la red ha perdido su carácter, ya que "antes" permitía con más facilidad "el diálogo y el debate", las bases de la política.

Aseguró también que después de unas semanas, no se había perdido nada y que a pesar de perder capacidad de incidencia a corto plazo, después de unas semanas sin Twitter tiene "más confianza en la humanidad, veo más lo que nos une que lo que nos separa. Aseguró que ha dedicado más tiempo a leer, pensar y escuchar directamente a la gente, no a través de un tuit, sino hablando". Así que considera un acto de "coherencia" con su compromiso político dejar la red. "Para que el amor gane al odio, arrivederci Twitter", escribió.