Falta muchísimo para terminar el corredor mediterráneo. Demasiado. Eso piensa el Govern, y también lo piensa la Comisión Europea. Así se ha demostrado este miércoles por la tarde en el recinto modernista de Sant Pau de Barcelona, en un acto sobre la Mesa Estratégica del Corredor Mediterráneo. El vicepresidente del Govern, Jordi Puigneró, se ha dedicado a dar un repaso a la infrafinanciación que sufre Catalunya por parte del Estado. Por ejemplo, de las 33 actuaciones que la Agenda Catalana del Corredor Mediterráneo del año 2011 señalaba que estuvieran ejecutadas en el 2020, solo dos se han puesto en servicio de manera incompleta. "¿Qué problema hay para que los tres puertos más importantes del Estado -Barcelona, Tarragona y Valencia- no estén conectados entre ellos con el alta velocidad?", se ha preguntado Puigneró.

Y lo mismo se ha preguntado a la coordinadora del Corredor Mediterráneo de la Comisión Europea, Iveta Radičová. "¿Qué problema hay?". Ha asegurado que a menudo observa que "la diferencia de prioridades entre los gobiernos nacionales y los gobiernos regionales" es lo que más obstaculiza que saquen adelante algunas infraestructuras. Es por eso que ha instado la Generalitat y la Moncloa a identificar cuáles son los problemas reales que impiden la ejecución total del corredor mediterráneo. "Después de eso, pienso ayudar de la manera a que sea posible", ha añadido. Las palabras de la ex primera ministra de Eslovaquia han ido en la misma línea que Puigneró; que como conseller de Polítiques Digitals i Territori y por lo tanto responsable de las infraestructuras del país ha destacado que la intención del ejecutivo catalán es alinearse con Europa y hacer una clara apuesta por la descarbonización.

"Han pasado los años y constatamos que esta no ha sido nunca una prioridad del Estado", ha afirmado Puigneró. Según él, la infrafinanciación de Catalunya y la sobrefinanciación de Madrid representa "un mensaje muy claro" del Estado "hacia la ciudadanía y las empresas catalanas. "Catalunya sufre un déficit de inversiones sistémico desde hace ya más de una década", ha añadido al vicepresidente del Govern.

 

Quien se ha tenido que defender de todas estas acusaciones ha sido el coordinador español del Corredor Mediterráneo, Josep Vicent Boira. Ha asegurado que el Gobierno ha dado en los últimos años pasos para que esta infraestructura sea una realidad y para que no haya errores en su construcción. Ha querido recordar que el corredor mediterráneo está declarado de manera oficial una prioridad por el Estado solo desde el año 2011. En este sentido, ha dicho que ha pasado poco tiempo para que la ejecución total del corredor sea una realidad. "¿Las cosas se pueden hacer mejor?", se ha preguntado retóricamente Boira; pregunta que ha respondido afirmativamente. "Pero también se pueden hacer peor: desde que llegué yo se han hecho políticas pragmáticas y se han corregido dinámicas", ha dicho; para asegurar que ahora "ya podemos ver la luz al final del túnel".