Sólo falta un apoyo para que la investidura de Pedro Sánchez pueda salir adelante: el de Unidas Podemos. Así lo ha recordado la portavoz en funciones del Gobierno, Isabel Celaá, que un viernes más ha utilizado la sala de prensa de la Moncloa para presionar a sus potenciales socios. De esta manera, la dirigente española ha celebrado que ya cuenten con el apoyo activo o pasivo del PRC, el PNV y ERC, con quienes se han reunido también esta semana. "No hay que reiterar que la posición del PSOE es no aceptar un referéndum de autodeterminación", ha avisado después de referirse a los republicanos.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, al día siguiente de la larga y frustrada reunión entre los equipos negociadores del PSOE y Unidas Podemos, Celaá ha defendido que "hay diferencias, pero tenemos espacio por recorrer". Es por eso que ha vuelto a ofrecer una "tercera vía" a la formación de Pablo Iglesias, a medio camino entre el gobierno de coalición y el gobierno monocolor, con una "participación activa y potente en altas representaciones del Estado". Pero con la puerta completamente cerrada a una oferta de gobierno conjunto.

La dirigente socialista en funciones también ha descartado la posibilidad de llegar a una investidura sin acuerdos pero con el apoyo de Unidas Podemos. Es un extremo que ha insinuado una de las miembros del equipo negociador de Podemos, Yolanda Díaz, que ha avisado de que "dificultarían la acción de gobierno". Pero en el PSOE no lo contemplan. "Este es un callejón sin salida que no merecen ni la ciudadanía ni las fuerzas políticas", ha sostenido.

"Hay convicción y determinación por parte de los que negocian por parte del PSOE que no habrá un gobierno de coalición", ha insistido varias veces Celaá, que se ha abierto a "fórmulas de cooperación potentes para que puedan participar activamente en las tareas de Estado". Le ha recordado que les ofrecen un "programa abierto y progresista" y varios mecanismos de control de cumplimiento del pacto.

Después de las vacaciones de agosto, este jueves tuvo lugar la primera reunión entre los equipos negociadores del PSOE y Unidas Podemos, que a pesar de las casi cinco horas de duración no sirvió para acercar posiciones. Celaá ha señalado que, en algún momento u otro antes del deadline del 23 de septiembre, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias mantendrán un nuevo encuentro.