La Moncloa contiene y desvía la bomba que ha caído este martes en el Ministerio del Interior después de que el Tribunal Supremo haya declarado ilegal el cese del coronel Diego Pérez de los Cobos, ordenada por Fernando Grande-Marlaska. El Gobierno relativiza la decisión del Alto Tribunal y la ciñe a una "cuestión de forma y no de fondo". Es el argumento que ha argüido este martes la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, después del Consejo de Ministros, desde donde ha explicado que "siguen valorando las motivaciones que llevaron a aquella decisión". En este sentido, Rodríguez ha declarado "respeto absoluto" hacia la sentencia judicial y ha recordado que todavía "no se conoce el texto de la sentencia".

La oposición se lanza contra Marlaska

Como respuesta a la sentencia del Supremo, el Partido Popular se ha lanzado al cuello del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a quien ha reclamado el "cese fulminante" o la dimisión "si todavía le queda un poco de dignidad". "Para responder a la ilegalidad manifiesta y sentenciada solo cabe cesar lo que promovió la destitución", ha explicado la portavoz en el Congreso de los Diputados, Cuca Gamarra, que ha advertido que su partido pondrá en marcha una ofensiva parlamentaria "que conduzcan a otra reprobación" en caso de que el ministro del Interior no sea destituido.

Con la misma contundencia se ha expresado el portavoz adjunto de Ciudadanos, Edmundo Bal, que considera que Pedro Sánchez lo tiene que cesar por la "absoluta negligencia" en relación al caso de Pérez de los Cobos. "Fue un cese arbitrario porque lo que pretendía Marlaska era que el coronel rompiera con el secreto del sumario judicial", ha argumentado Bal.

El contexto de la destitución

El ministro Marlaska apartó al coronel Pérez de los Cobos de la Comandancia de la Guardia Civil porque el coronel se negó a informar sobre la investigación que había abierta en torno al 8-M de 2020. Ahora el Tribunal Supremo anula la sentencia de la Audiencia Nacional, en fecha 15 de septiembre de 2021, que avaló el cese considerándolo legal. De esta manera el Supremo hace caso al recurso interpuesto por el coronel y confirma la sentencia adoptada en primera instancia en la Audiencia Nacional, que rechazó la destitución.

Según ha informado el Tribunal Supremo, la sentencia se dará a conocer en los próximos días. Sin embargo, es un golpe para Marlaska, quien en un primer momento atribuyó el cese a razones de organización internas y lo desvinculó de este informe. Posteriormente, alegó "pérdida de confianza", ya que ha sostenido que el suyo era "un cargo de confianza" y, por eso, creía que no tenía que dar más explicaciones.

Tan pronto como se ha sabido la decisión contundente del Supremo, el Ministerio del Interior se ha limitado a afirmar que se encuentran a la espera "de conocer el contenido íntegro de la resolución para poder proceder en consecuencia con los motivos técnicos que indican el Alto Tribunal". Además, alineados con la Moncloa, han sostenido sus motivos para destituirlo: "El Ministerio del Interior reitera que las razones de fondo que decidieron el cese persisten y se han visto confirmadas y consolidadas con los elementos conocidos con posterioridad".