El Comité Federal del PSOE que se celebra hoy se había planteado como un medio por acallar a los barones del PSOE contrarios al diálogo bilateral entre el Estado y Catalunya y dar una imagen de unidad al partido.

Pero el presidente de Castilla-La Manxa, Emiliano García-Page, se ha desmarcado de la posición oficial del Gobierno. Si bien ha aceptado que el diálogo es inevitable, también ha apuntado que "La Constitución permite hablar de mucho, pero también limita hablar de ciertas cosas".

García-Page ha advertido contra "los privilegios territoriales" que se podrían derivar del diálogo, ha afirmado que su posición es diferente a la del PSC, y se ha mostrado contrario a rebajar las penas del delito de sedición.

Otros barones, en cambio, se han mostrado seguros de que Sánchez sólo aceptaría un diálogo dentro de la legalidad y han asegurado que el Comité Federal aprobará la política catalana de Sánchez.