La portavoz de la CUP en el Parlamento de Catalunya, Anna Gabriel, no ha hecho caso mucho a las amenazas del Gobierno español sobre dejar de pagar el FLA si ve que el Govern se ha gastado dinero en la preparación del 1-O. En una entrevista en Catalunya radio, Gabriel ha afirmado que las amenazas del Gobierno "no se pueden tomar seriamente" y ha asegurado que "no dejarán de pagar el FLA ya que el dinero va a acreedores que el Gobierno de Rajoy no tiene interés al dejar de pagar".

Unas amenazas del Estado a las que Gabriel también se ha referido después de que la Guardia Civil interrogara este miércoles al secretario de Presidencia, Quim Nin, y el director general de Atención Ciudadana, Jordi Graells y lo haga este jueves con el exportavoz del Pacte pel Referèndum, Joan Ignasi Elena. "No podemos normalizar lo qué está pasando con los interrogatorios de la Guardia Civil a los funcionarios", ha declarado Gabriel, que ha señalado que "lo que tendría que ser normal es que se acabe la equidistancia de algunos responsables políticos delante de lo que" está "pasando".

Sin embargo, la portavoz de la CUP ha afirmado que nada de lo que tenga que ver con el 1-O se puede detener por las amenazas del Estado, como por ejemplo la aprobación de la ley del Referéndum. "Estamos trabajando para que la ley del referéndum se apruebe al principio de septiembre y no tiene que haber impedimentos para que eso sea así", ha afirmado Gabriel. Ha añadido que esta aprobación se tiene que hacer aunque se tengan que "desobedecer" suspensiones y advertencias del Estado o el Tribunal Constitucional (TC).

La diputada ha justificado que la reforma del reglamento del Parlament se ha hecho porque el TC ha demostrado que "no se permite el debate parlamentario" y que se obliga a "restringir" este debate. Así, en el escenario en que se llegue a suspender el nuevo reglamento o algunos de sus artículos, Gabriel ha dicho que se instará a incluir en el orden del día la ley "en debate ordinario" y "con todas las advertencias penales que ocurran, la amenaza de que ocurra sobre la Mesa y sobre los diputados que insten a hacer el debate".

Así, ha considerado "imprescindible" que se acepte la desobediencia a estas advertencias aunque ha dicho que "quizás no hará falta llegar a eso". En todo caso, ha dicho que si hay una suspensión del reglamento en previsión que pueda utilizar para aprobar la ley del referéndum, igualmente "se tirará adelante" con la inclusión de la norma en el orden del día para su aprobación.

Ha añadido que por más dictámenes o advertencias judiciales la CUP no dejará de hacer aquello que dijeron que harían, aprobar la norma. Por eso, ha garantizado que se entrará a registro "antes de marcharse de vacaciones" y como "máximo" el lunes. Ha defendido también que no hay que esperar a finales de septiembre para aprobarla y ha defendido aprobarla "a principios". Ha dicho que podría ser en el primer pleno, previsto para la primera semana, o bien a través de un pleno extraordinario ya que ha dicho que hacen falta el "plazo suficiente" para poder garantizar que se pueden desarrollar todos los pasos necesarios. De la misma manera, ha esperado que el decreto de convocatoria del referéndum se firme "como antes mejor".