Alberto Núñez Feijóo ha fracasado en su intento de fichar a Inés Arrimadas para la lista del PP en Madrid de cara a las elecciones generales del 23 de julio. Así, según el medio The Objective, finalmente, la segunda plaza de la lista la ocupará Marta Rivera de la Cruz, otra exdirigente de Ciudadanos. Después de la derrota del partido naranja en las elecciones municipales del 28 mayo, Arrimadas defendió la idea que el partido no concurriera a las generales, cosa que beneficia el PP y que el propio Feijóo agradeció públicamente.

El pasado 1 de junio, Arrimadas anunció en rueda de prensa desde el Congreso de los Diputados que abandonaba la política y que no entraría a formar parte del PP. Sin embargo, tal como explica el medio mencionado, Feijóo no perdió la esperanza al ver que la exdirigente naranja no renunciaba al acta de diputada y que continuaba en la Diputación Permanente del Congreso hasta acabar la legislatura. Y es que Feijóo quiere más "voces femeninas" en el hemiciclo. Pero Arrimadas, como su excompañera de partido y exvicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, ha renunciado al PP.

Los disidentes de Ciudadanos amenazan con un nuevo partido

Recientemente, tres destacados miembros de Ciudadanos han anunciado su intención de crear un nuevo partido político de centro para las elecciones generales del 23-J. Se trata de diputado en el Congreso Edmundo Bal, el procurador de las Cortes de Castilla y León Francisco Igea y el exconcejal en el Ayuntamiento de Madrid Santiago Saura. Se han unido para impulsar este nuevo proyecto después de calificar Ciudadanos de partido "muerto". En una reunión en Madrid con quince miembros del Consejo General de Ciudadanos, Bal se ha pronunciado públicamente al respecto. "Quiero decir una cosa a mi partido, ellos se quedan con la caja, nosotros nos llevamos las ideas", ha afirmado. Así, ha puesto de manifiesto su descontento con la dirección del partido y su determinación de buscar un nuevo rumbo político.

Entre este grupo de miembros de Ciudadanos que quiere formar un nuevo partido también está Víctor Gómez Frías y Borja Soto. A pesar de las sanciones internas, siguen trabajando para hacer realidad su propósito de construir un partido que represente a los "seis millones de españoles que se identifican con el centro político".

Finalmente, Bal ha aprovechado la ocasión para acusar a los actuales dirigentes de Ciudadanos, Adrián Vázquez y Patricia Guasp, de haber "asesinado" al partido, argumentando que su interés personal era "apoderarse de los fondos del partido", que según este grupo de críticos, asciende a 7 millones. E Igea ha remarcado que su objetivo es "construir un proyecto liberal, transparente y reformista que mantenga las políticas que en su día representó C's y que ahora parecen haber desaparecido".