La fiscal general del Estado, María José Segarra, ha confirmado este viernes que se ha abierto una pieza separada para estudiar la "trascendencia penal" de las grabaciones que el excomisario José Manuel Villarejo (en prisión preventiva) hizo a la amiga íntima del rey Juan Carlos I, Corinna zu Sayn-Wittgenstein el año 2015 en Londres. "Hay unas cintas intervenidas en fase de estudio, transcripción y comprobación de su contenido", ha afirmado.

La fiscal avisa de que se estudiará la trascendencia penal que tengan "para cualquier persona" sin descartar, a priori, que la investigación pueda salpicar al rey emérito. "Se investigará y se dará la respuesta necesaria", ha manifestado desde unas jornadas de la escuela de verano de la Complutense, en el Escorial.

Entre otros, la investigación tendrá que aclarar si la examiga de Juan Carlos I contrató al excomisario José Manuel Villarejo para que intercediera con el objetivo de ayudar a un empresario británico conocido suyo, Ben Goldsmith, que tenía problemas con Hacienda.

En las grabaciones, Corinna también habría relatado a Villarejo que el rey emérito tenía cuentas en Suiza y que la había usado como testaferro.