Catalunya ha estado gobernada por un grupo de dirigentes que desprecian la realidad de su país. Así lo ha asegurado el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, que este martes ha visitado el Centro Cultural Galego Saudade, acompañando a Xavier Garcia Albiol. "Desgraciadamente esta comunidad ha tenido muy mala suerte con sus políticos", ha lamentado. "En este momento Catalunya está secuestrada por un conjunto de políticos intolerantes que detestan la Catalunya real".

Jugando en casa, y erigiéndose como galleguista, el presidente de la Xunta ha pronunciado un discurso muy duro contra el independentismo, que considera que ha engañado a los ciudadanos y ha convertido al país en "objeto en broma" en el resto del Estado. "Nos han querido engañar camuflando las urnas, declarando una República que era de cartón piedra, inventándose un falso exilio y una falsa represión", ha criticado. También ha hecho referencia a su última visita a Catalunya, el pasado agosto, con motivo de la manifestación contra el terrorismo. Se marchó "más que preocupado", porque, según él, la convirtieron "en un acto político contra el Rey y el presidente del Gobierno".

En la víspera del Día de la Constitución española, Feijóo ha querido defender con firmeza la Carta Magna, porque "celebramos 39 años de democracia en España". También ha defendido encarnizadamente la aplicación del artículo 155: "Un presidente tiene que cumplir sus obligaciones. Si se transforma en la persona que más veces incumple la legalidad, no está legitimado", ha afirmado. "Gracias a las Cortes españolas aquí se podrá votar".

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El presidente gallego ha mostrado cierta comprensión por los posicionamientos de la CUP e incluso de ERC, pero se ha mostrado más chocado por los del PDeCAT, con quien ha dicho que ha trabajado mucho años atrás. "Se ha convertido en un partido antisistema", ha criticado. Ha subrayado las "diatribas" contra la Unión Europea. "Si han sido capaces de destrozar a CiU, ¿cómo no serán capaces de destrozado Catalunya?", se ha preguntado.

En este sentido, ha alertado de que "aquel partido moderado" ya no existe. "Por eso estamos aquí", ha añadido. "El 21 de diciembre se acabará esta tragicomedia, porque la gente está harta", ha asegurado el presidente gallego. Haciendo suyo el lema de la campaña de Albiol, ha sostenido que "España no es el problema", sino que es "la solución contra el independentismo intolerante".