Los familiares de los presos políticos ha hecho sentir su voz este martes en Estrasburgo, en la sede del Parlamento Europeo, conjuntamente con la de los familiares de los jóvenes de Altsasu y del grupo de apoyo al rapero Valtonyc. Todos ellos se han desplazado hasta las instituciones europeas para unir fuerzas e interpelar a la UE para que posicionen en la causa.

El acto, que llevaba por título Defendiendo los derechos fundamentales a la UE: el caso de España, y que ha sido organizado por ocho partidos, ERC, el PDeCAT, Podemos, PNV, Bildu, BNG, Catalunya en común e Izquierda Unida, ha servido para que los familiares hayan podido explicar su situación personal y también para que algunos abogados, como Andreu Van den Eynder, hayan aportado la denuncia jurídica del caso. Además, también ha servido para que los familiares de los jóvenes de Altsasu, acusados de terrorismo por una pelea de bar, y los del rapero Valtonyc hayan podido internacionalizar un poco más su lucha.

El acto se ha hecho coincidiendo con los 100 días de encarcelamiento que ya cuentan algunos de los presos como los consellers Raül Romeva, Dolors Bassa, Jordi Turull y Josep Rull, sumados a los largos siete meses de prisión de los Jordis y del vicepresidente Oriol Junqueras y el conseller Quim Forn, y justamente hoy que es el cumpleaños de la expresidenta del Parlamento Carme Forcadell.

"El estado español actúa por venganza"

"El estado español actúa por venganza y no por justicia". Así ha denunciado Anna Forn, hija de Joaquim Forn, la situación de prisión preventiva que vive su padre y los otros presos políticos. En un discurso de cinco minutos, los mismos que puede utilizar para hablar con su padre por teléfono desde la prisión, tal como se ha encargado de recordar, Forn ha asegurado que España vive una "involución democrática" y ha pedido en la Unión Europea que posicione.

"La UE no tendría que permitir que un estado miembro actuara con impunidad", ha denunciado la hija del conseller, que también ha criticado la "arbitrariedad" con la que actúa la justicia español ya que hace una "interpretación caprichosa" del Código Penal, a pesar de mostrarse confiada en la europea.

Mensaje de Romeva a sus excompañeros

Anna Forn no ha sido la única familiar presente en el acto. Una amplia delegación catalana se ha acercado también a Estrasburgo para denunciar la situación: la mujer de Raül Romeva, Diana Riba; Laura Masvidal, mujer de Joaquim Forn; Ferran Pegueroles, hijo de Carme Forcadell; Montse Bassa, hermana de Dolors Bassa; Xavier Sànchez Picanyol, hermano de Jordi Sànchez y Francesc Riera, cuñado de Oriol Junqueras.

Riba, que también ha tenido oportunidad de dirigirse a los asistentes durante el acto, ha podido explicar su caso y la vulneración de los derechos de sus hijos a poder estar con su padre, además de leer una carta de Raül Romeva dirigida a los eurodiputados. El conseller, que fue eurodiputado durante diez años, ha querido denunciar su situación y la del resto de presos, además de la de los jóvenes de Altsasu y del rapero Valtonyc. También ha querido interpelar a los eurodiputados presentes en el acto a denunciar la situación.

Un "ataque" contra todo el movimiento independentista

También ha hablado el cuñado de Oriol Junqueras, Francesc Riera, que ha criticado que Catalunya sufre una "involución democrática en derechos y libertades" y ha denunciado que si sus familiares "estuvieran en Bélgica, Escocia, Alemania o Suiza estarían en libertad". Para Riera, la prisión preventiva "es un disparate" que ataca el conjunto del movimiento independentista. En este sentido, ha avisado que el estado español haya declarado "todo un gobierno catalán, más de medio Parlamento y más de dos millones de personas forman parte de una organización criminal".

Finalmente, el abogado Andreu Van den Eynde ha aportado una visión jurídica de los hechos, denunciado en la Eurocámara que en el caso de los independentistas encarcelados "no se respeta ninguna garantía procesal o jurídica de las partes" y ha asegurado que se está investigando a personas y no hechos, en lo que ha calificado como una "causa general".

"Los interrogatorios sobre ideología son constantes: qué votas, qué piensas, y sobre todo si renuncias a tu ideología. Eso se les pregunta repetidamente a los investigados", ha lamentado el abogado de Junqueras y Romeva. Van den Eynde también ha dicho que tienen poca confianza en la justicia española y que es probable que el caso acabe al Tribunal Europeo de Estrasburgo, cuya sede está en escasos minutos del Parlamento Europeo.

Hasta doce eurodiputados presentes

La jornada ha empezado con una breve rueda de prensa con medios y después habido un debate con todos aquellos eurodiputados que se quieran añadir. Entre ellos estaba el flamenco Mark Demesmaeker, la sueca Bodil Valero, el eslové Ivo Vajgl, el letón Miroslav Mitrofanov, la galesa Jill Evans, el francés José Bové, el portugués António Marinho e Pinto y los eurodiputados del estado español Miguel Urban, Ernest Urtasun, Ramon Tremosa, Jordi Solé, Josep-Maria Terricabras.

En este punto se han expresado varios eurodiputados como Ivo Vajgl o Mark Demesmaeker que han querido lanzar un sentido mensaje a las familias y dejarles claro que no están solos.

Vajgl, que es además presidente de la Plataforma Diálogo UE-Catalunya, ha asegurado sentirse "avergonzado por como este Parlamento Europeo ha reaccionado a la situación en el Estado". "Es hora que este Parlamento reaccione con más sensibilidad ante la situación catalana", ha dicho Vajgl, que también ha denunciado que la actitud del Estado español tiene como objetivo "humillar a la persona, romperla, aislarla y abandonarla". "Eso no tendría que pasar en la Unión Europea democrática", ha dicho el esloveno, remarcando que tiene "dudas serias" sobre la calidad de la democracia en el Estado.

Por otra parte, el flamenco Demesmaeker ha insistido en que la UE "tendría que ser una unión de valores" però que "ahora se desintegran". "Es una vergüenza", ha concluido, lanzando un claro mensaje a los familiares de los presos: "No estáis solos".

También ha hablado el famoso eurodiputado francés y activista José Bové y el diputado de Podemos Miguel Urban que han querido denunciar la situación y dar apoyo a las familias.