El exdiputado y periodista Albano-Dante Fachín ha cargado esta mañana contra la reunión que han celebrado la consellera de Presidència, Laura Vilagrà, y el ministro Félix Bolaños en el Palau de la Generalitat y donde se ha anunciado una nueva reunión de los presidentes, Pere Aragonès y Pedro Sánchez, el próximo viernes en la Moncloa. Durante el encuentro Vilagrà y Bolaños han presentado un  "Acuerdo marco para el diálogo y la negociación" que tiene que servir de base para recuperar las relaciones entre los dos ejecutivos. "Nos guste más o menos, los del PSOE son unos cracs. Han conseguido tener el Govern domesticado y totalmente alineado con los intereses de la Moncloa borbónica", ha sentenciado Fachín.

La reunión tenía que servir para abordar las garantías que Vilagrà había reclamado al Gobierno para recuperar las relaciones, que habían quedado congeladas a raíz del escándalo provocado por el espionaje a los líderes del independentismo, pero Fachín reprocha que el Govern no ha hecho más que doblegarse a los intereses del PSOE. "Rendidos y desarmados. Brutal", ha reprochado.

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Captura del tuit d'Albano Dante Fachín

También el exdiputado de la CUP Antonio Baños ha cargado contra el encuentro con un tuit en que ironiza sobre las sucesivas reuniones entre los dos gobiernos que se cierran sin concretar acuerdos. "Hace un año... que acabamos de redactar... las bases de los prolegómenos del marco del cuadro, del inicio del arranque, del diálogo sobre el cual negociar para establecer una charla," ironiza.

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Captura del tuit de Antonio Baños

El documento que han presentado Bolaños y Vilagrà bajo el título de Acuerdo marco para el diálogo y la negociación no aporta novedades concretas a la negociación ni a su metodología. Eso sí apuesta por superar la judicialización del procés "garantizando la seguridad jurídica" y la búsqueda de acuerdos en el marco de la vía política y pactada para resolver el conflicto. El texto se compromete a convocar la mesa de diálogo como mínimo dos veces este año, y hacerlo de manera pública. En las dos páginas no hay ninguna referencia explícita al CatalanGate, y se limita a incluir un compromiso para garantizar los derechos fundamentales y la libertad ideológica, "rechazando mecanismos ilegítimos" que vulneren estos derechos.