Los eurodiputados catalanes Ramon Tremosa, Josep Maria Terricabras y Jordi Solé han preguntado a Frans Timmermans, vicepresidente primero de la Comisión Europea, si acturà de oficio para frenar el discurso de odio del Partido Popular contra el independentismo.

Concretamente, la pregunta que han planteado los tres eurodiputados hace referencia a unas declaraciones del líder de los populares, Pablo Casado, que en rueda de prensa afirmó que el independentismo "es violento" y que se oponen con violencia a quien saca lazos amarillos de la calle.

Los tres eurodiputados consideran que las declaraciones de Casado como "una clara estrategia para alimentar el nivel de confrontación" y "representan un discurso de odio contra los independentistas", a la vez que aseguran que en todas las manifestaciones independentistas, donde han asistido "miles de ciudadanos", nunca ha habido "ni un solo caso de violencia".

El objetivo principal de Tremosa, Terricabras y Solé es preguntar a la Comisión si considera que las palabras de Casado contribuyen a "calmar las tensiones" y si abogan por el diálogo, tal como ya pidió la UE a todos los implicados en el "conflicto catalán". También piden a Timmermans si tomará medidas para prevenir el discurso "de odio" dirigido a los ciudadanos soberanistas para escalar al tensión.