Una vez más, este jueves se han vuelto a evidenciar las diferencias del independentismo en el Congreso de los Diputados. Al día siguiente de la primera reunión de la mesa de diálogo entre el Estado y la Generalitat, había un tema candente encima de la mesa: la convalidación del techo de gasto, paso previo a la tramitación de los presupuestos del Estado. El resultado final es que ha salido adelante, con la abstención clave de Esquerra Republicana y el voto en contra de JxCat, que ha tenido un intenso debate interno. Los primeros lo han vinculado a la mesa y los segundos han querido desvincularlo. Después del pleno en la cámara baja, los republicanos han explotado por lo que consideran una "deslealtad" de su socio de gobierno.

Según explican fuentes de ERC, el lunes pasado JxCat tenía pensado votar a favor del techo de gasto, porque veían una ligera mejora. No obstante, siempre según estas fuentes, las cosas cambiaron cuando el partido de Carles Puigdemont supo que los republicanos se abstendrían. "Es ahí cuando Waterloo ordena votar en contra", sostienen desde Calabria. Es por eso que dicen que, a partir de ahora, difícilmente volverán a adelantarles el sentido de su voto en otras iniciativas. "Juegan con eso, juegan con el desgaste", critican.

La decisión final de JxCat, según esta formación, se ha tomado a última hora, con el pleno en funcionamiento. Y se ha tomado después de un fuerte debate interno. La justificación para no aprobarlos finalmente es que no ha habido ningún tipo de negociación por parte de la ministra Montero. Eso sí, fuentes del grupo puntualizan que, si hubiera dependido de sus votos que se convalidara, se habrían abstenido.