El Tribunal Constitucional ha admitido a trámite el recurso contra el archivo de la denuncia por maltratos contra un joven independentista detenido en octubre del 2019 en el marco de las protestas contra la sentencia del Tribunal Supremo sobre el 1-O.

Al joven, que entonces era menor de edad, se lo conoce porque llevaba una sudadera naranja y fue arrestado mientras estaba sentado en medio de la Via Laietana de Barcelona cuando se inició una carga de la Policía Nacional. El joven denunció supuestos maltratos por parte de los agentes, pero el juzgado y la Audiencia de Barcelona archivaron la causa. Ahora el TC podría reabrirla

En un auto el alto tribunal justifica la admisión a trámite porque en el caso puede haber una "especial trascendencia constitucional, porque el recurso puede dar lugar al tribunal a aclarar o cambiar su doctrina, como consecuencia de un proceso de reflexión interna, y el órgano judicial podría haber incurrido en una negativa manifiesta del deber de acatamiento de la doctrina de este tribunal".

El tribunal pide a la Audiencia y al juzgado de instrucción número 11 que le remitan todas las actuaciones.

Los hechos investigados

El chico relató algunas vejaciones vividas, como tenerlo arrodillado de cara a la pared durante mucho rato en el interior de la Jefatura de la Policía en Via Laietana, insultos, collejas y amenazas. Sufrió erosiones y golpes y explicó que un agente parecía que intentara introducir un cuchillo que no era suyo en su mochila. También vio que un agente había llamado con su teléfono, seguramente involuntariamente. El joven negó haber agredido a los agentes, como lo acusaba la policía.

 

La plataforma de apoyo al joven se ha felicitado por esta admisión a trámite, aunque son "conscientes de la deficiencia histórica del estado español" en la investigación de los maltratos policiales. "Somos conscientes de que a la policía nunca se la condena, por más evidentes que sean sus delitos", concluyen, pero añaden que nunca se rendirán.