Los disturbios de Barcelona "tienen unos responsables que lo han alentado". Así lo ha denunciado este jueves el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande Marlaska, después de reunir el comité de crisis sobre Catalunya, esta vez presidido por Pedro Sánchez en el Palacio de la Moncloa. La condena de la violencia hecha esta noche les ha sabido en poco, y le ha pedido que lo haga de forma más clara. Ha querido enviar también un mensaje a los violentos: "No habrá impunidad". Por eso la policía española se quedará en Catalunya el tiempo que haga falta.

Desde la sala de prensa de La Moncloa, Marlaska ha denunciado que, junto con las "manifestaciones pacíficas", hay "grupos minoritarios pero perfectamente organizados" que con violencia hacen un daño "no sólo material sino también reputacional a la imagen internacional de Catalunya". En este punto, ha señalado directamente hacia las autoridades catalanas: "Tienen unos responsables que lo han alentado". Ha garantizado a los "muchos catalanes que se sienten desorientados y huérfanos" que el Gobierno "está trabajando para garantizar su bienestar y su seguridad".

Frente a eso, Marlaska ha insistido en reclamar una condena de la violencia al president Torra, porque la que hizo esta medianoche no sirve a La Moncloa. Le ha exigido una "condena de forma clara e indubitada, no a última hora de la noche y arrastrada". De la misma manera, también le ha pedido "que tenga un recuerdo hacia los agentes que están garantizado la seguridad del conjunto de los ciudadanos". Ha evitado pedir la dimisión, pero le ha advertido que "actuará en todo momento con firmeza, ponderación y proporcionalidad" y "se aplicará a cada hecho el marco normativo que corresponda". Le ha interpelado a decidir "si es el presidente de todos los catalanes o un activista". Una vez más, sin embargo, han evitado activar mecanismos excepcionales.

"No habrá impunidad

La intervención del ministro del Interior en funciones ha empezado con una exposición de datos. Ayer se produjeron un total de 46 detenciones, y desde el lunes la cifra sube hasta las 97. Hay 197 agentes heridos entre los Mossos y el Cuerpo Nacional de Policía. Ayer se incendiaron 190 contenedores y el martes 250. Sólo el martes, los daños a mobiliario urbano asciende hasta los 627.000 euros. También ha subrayado que cuatro de los detenidos se encuentran en prisión provisional por resolución judicial por los delitos de desórdenes públicos y atentado contra la autoridad.

"Que nadie tenga duda que se continuará deteniendo a aquellos que tengan conductas delictivas. No habrá impunidad", ha advertido Marlaska en este punto. De la misma manera, ha rechazado que se trate de infiltrados. "Son personas relacionadas con movimientos que tratan de perturbar la seguridad y la convivencia con fines supuestamente políticos", ha denunciado.

La policía se queda

Por otra parte, el ministro del Interior en funciones ha vuelto a remarcar la coordinación y cooperación "excelente" entre los Mossos d'Esquadra, el Cuerpo Nacional y la Policía. Ha recordado que el refuerzo se hizo "a solicitud de los Mossos para garantizar la seguridad de las personas y las infraestructuras especialmente críticas". Y ha añadido: "Esta cooperación seguirá durante el tiempo que sea necesario y preciso". A pesar de todo, ha hecho un llamamiento a manifestarse "de manera pacífica como lo ha hecho la mayoría".