Ciudadanos ha pasado en cuatro años de ganar las elecciones al Parlament del 21-D del 2017 y propulsarse en la política española a vivir una histórica derrota en las elecciones en el Congreso de los diputados del 10-N del 2019 y suspirar por salvar los muebles en este 14-F, con unas encuestas que, en las mejores perspectivas, les auguran una pérdida de casi un tercio de los escaños actuales.

En esta situación, desde el interior de Ciudadanos ya afloran voces críticas con la gestión que está haciendo Inés Arrimadas y su candidato en Catalunya, Carlos Carrizosa, y que ya se preparan para enderezar el partido a partir del próximo lunes si los resultados son todavía peores de los esperados. Así lo avanza 'Público', que señala que cada vez es más importante la oposición interna a Arrimadas y al vicesecretario general de Ciudadanos y director de campaña, Carlos Cuadrado, personaje que mucho consideran como el poder en la sombra del partido españolista y a quien acusan de mantener una gestión 'bunquerizada' de la cúpula del partido.

Después de sucesivas crisis en el partido y la huida de muchas de sus figuras principales -la última, Lorena Roldán, que tras ser desbancada como candidata a la presidencia de la Generalitat se pasó al Partido Popular- la contestación interna no se detiene. Fuentes del partido citadas por el medio mencionado lo tienen claro: "Si seguimos así, vamos a desaparecer", y apuntan a una nueva huida generalizada si los resultados electorales confirman los malos augurios de las encuestas.

La campaña hace rebosar el vaso

Aunque las maniobras de acercamiento de Arrimadas al Gobierno no han gustado a muchos cuadros del partido, ha sido el desarrollo de la campaña electoral la gota que amenaza con hacer rebosar el vaso. "Ha sido desastrosa", apuntan las fuentes citadas por 'Público', tanto por el fondo como por la forma. Así, acusan a Arrimadas de haber renunciado a batallar contra el independentismo, hecho que ha permitido a Vox coger impulso en este aspecto. A eso se sumaría una relación ambigua con el PSC, partido a quien se critica pero al mismo tiempo aparece como socio preferente en el 'pactómetro' postelectoral de Ciudadanos.

La forma tampoco ha sido nada lograda, empezando por la controvertida campaña de los abrazos, que tuvo que retirarse para utilizar fotografías extraídas de un banco de imágenes que no permitía el uso para finalidades políticas.

En esta coyuntura, el día siguiente del 14-F puede ser movido en Ciudadanos.

 

Imagen principal: Arrimadas y Carrizosa en un acto electoral en Girona / Efe