El pacto entre el PSOE y Junts, cerrado este jueves, que incluye la aprobación de la amnistía, ha hecho despertar agrupaciones de policías, guardias civiles, jueces e incluso inspectores de trabajo. Este viernes, el último colectivo que se ha sumado a las protestas públicas contra el pacto ha sido el de los diplomáticos españoles, concretamente jubilados. Así pues, 61 diplomáticos fuera de servicio firman un manifiesto donde muestran su "preocupación e indignación" por la deriva de la política española, de la cual culpan directamente al presidente en funciones del Gobierno, Pedro Sánchez, "una persona que, con la condición de continuar en el poder, está pactando con los enemigos de la Nación y se muestra dispuesto a hacerles inimaginables concesiones a costa de España y de los españoles".

"Pedro Sánchez afirmó que su gobierno nunca otorgaría una amnistía porque no tenía cabida en la Constitución y, en el informe justificativo de la concesión de indultos a los sediciosos catalanes condenados por el Tribunal Supremo, aprobado por el Consejo de Ministros, se decía que -a diferencia de los indultos- la amnistía era claramente inconstitucional. El PSOE no incluyó en su programa electoral la concesión de una amnistía y durante la campaña se mostró contrario", reza el comunicado, que personifica sin escrúpulos la "culpa" de esta situación en Sánchez. Para más inri, los 61 diplomáticos utilizan una cita del President Tarradellas para mostrar su rechazo a la amnistía pactada entre el PSOE y Junts. "Según Tarradellas, la única cosa que no podía hacer un político era el ridículo, y Sánchez lo está haciendo con creces", afirman.

Los diplomáticos que firman este manifiesto afirman que Sánchez ha dejado en mala posición al estado español en el exterior, y recuerdan "los esfuerzos" de los embajadores y cónsules españoles por desmontar el relato independentista en el exterior y explicar "el golpe de estado dado desde el poder por las autoridades catalanas" y lamentan que ahora comprueben que todo este trabajo fue "en vano" porque "los golpistas actuaron, por lo visto, correctamente". "En un gobierno serio -sea de izquierdas o de derechas- lo importante es que gobierne con coherencia. Un presidente del gobierno responsable no puede someterse al chantaje de los enemigos de España y aliarse con los que pretenden destruirla", afirman.

Recuerdan el discurso del 3 de octubre de Felipe VI, y reniegan de un posible retorno de Carles Puigdemont

El grupo de diplomáticos pone especial énfasis en el hecho de que "las consecuencias de este increíble giro copernicano son extremadamente graves". Según avisan, si ahora se considera que "la actuación de los sediciosos catalanes fue legítima", también haría falta deducir que "el Rey Felipe VI habría rebasado sus funciones y errado al pronunciar su trascendental discurso del 3 de octubre de 2017, los jueces del Tribunal Supremo habrían prevaricado al juzgar y condenar injustamente y ex profeso a unos patriotas y el Gobierno y las fuerzas de seguridad que intervinieron legítimamente para restaurar la orden constitucional violeta abusaron de su poder y tendrían que pedir humildemente perdón a los golpistas por sus injustificables excesos".

Finalmente, también reniegan abiertamente de un posible retorno de Carles Puigdemont a Catalunya, y creen que podrá volver a España "en olor de multitud" con el reconocimiento por parte de Sánchez que "la celebración del referéndum ilegal del 1-O, las leyes de desconexión que abolían la Constitución y la declaración unilateral de independencia no fueron delitos, sino crisis políticas que nunca tendrían que haber sido judicializadas".