El primer cartel colgado en la campaña de las elecciones generales españolas del 28-A es la portada de muchos de los diarios de hoy. Tras unos días de tarea, digamos, de reconocimiento, como esos minutos al inicio de los partidos de fútbol donde los rivales se estudian, la prensa enseña hoy sus cartas sin pesar de que se le vea el plumero de uno u otro partido. El PSOE sale con ventaja, pues o bien las portadas lo maldicen o bien señalan los defectos de sus rivales, especialmente del PP. Al final, quien más espacio de portada tiene, por activa o por pasiva, son los socialistas o, como todavía dicen algunos, el sanchismo.
Los titulares son de garrotazo, tanto los informativos —La Vanguardia y El Periódico, que dejan en evidencia al PP— como los fantasiosos y exagerados —La Razón, ABC y El Mundo, que castigan al PSOE a base de bien. En resumidas cuentas, parece que las propuestas del PP, según los titulares, buscan enajenarse a los catalanes, a los pensionistas, a los parados...
La derecha mediática procura defender a los suyos como puede. La peor manera de hacerlo es editar propaganda electoral, como hace ABC. De entrada, esconde que los impuestos que le inquietan (patrimonio, sucesiones y donaciones) son el chocolate del loro de la recaudación fiscal. Además, no dice que esos impuestos son estatales, sóloque su gestión está cedida a las autonomías. Una comunidad nunca podría eliminarlos. Podía haberlo hecho el PP durante los años que dispuso de mayoría absoluta en el Congreso. No lo hizo. Tampoco quiso evitar las diferencias tan grandes entre comunidades autónomas. Un soltero de 30 años que hereda bienes valorados en 800.000€, de los cuales 200.000€ corresponden a su vivienda, pagaría un impuesto de 155.393€ en Aragón, 9.796€ en Catalunya y nada en Andalucía. El PP, además, legisló para favorecer estas diferencias, como explica Juan Torres, catedrático de Economía de la Universidad de Sevilla.
Encima, uno de los autores intelectuales de muchas de estas mistificaciones, Daniel Lacalle —un liberal del catecismo— es el gurú económico de Pablo Casado y candidato al Congreso. Va de cuatro por Madrid en la lista del PP —es decir, saldrá. Aquí aprieta el zapato.
En fin, los partidos que pongan a quien quieran en sus listas. Pero los diarios en sus portadas tienen otras obligaciones. Si en un asunto donde es tan sencillo encontrar datos —los hay para parar un tren— "informan" engañando de esta manera, tragándose y difundiendo las bolas de su partido de preferencia ¿qué no harán en otras cuestiones de interpretación más abierta, más "política"? De todo ello tendremos noticias muy pronto, seguramente mañana mismo.