La Guardia Urbana de Barcelona detuvo anoche a una persona acusada de quemar un contenedor en la Rambla en la manifestación convocada por los Comités de Defensa de la República (CDR) al cumplirse el primer año de la condena del Tribunal Supremo a la cúpula del 'procés'.
Medio millar de independentistas se manifestaron en la plaza Urquinaona y la Via Laietana de Barcelona, en medio de un amplio dispositivo policial, en el primer aniversario de la sentencia del 'procés', que dio paso a varias noches de protestas y represión policial en la capital catalana.
Contenedor en llamas / Sergi Alcàzar
La manifestación ha transcurrido sin incidentes hasta su tramo final, cuando los manifestantes han cruzado algunos contenedores en la vía, han quemado al menos uno de ellos y han provocado pequeños daños en el material urbano, primero en el paseo de Colom y luego en la Rambla, donde los Mossos d'Esquadra han alertado varias veces por sus altavoces de que habría una intervención policial inminente, aunque no ha sido necesaria.
Según han informado fuentes policiales, la Guardia Urbana ha detenido a uno de los manifestantes por quemar un contenedor en la Rambla.
“La independencia se gana en la calle”
Los manifestantes marcharon bajo el lema 'La independencia se gana en la calle' y gritaron consignas como 'Urquinaona, lo volveremos a hacer' y '1-O, ni olvido ni perdón'. Poco después de las 20h, la manifestación provocó cortes de tráfico en las calles confluyentes y a continuación bajó la Via Laietana con gritos de 'Fuera la bandera española' y 'Puta España' mientras algunos manifestantes subían a farolas retirando banderas españolas puestas el lunes por desconocidos con ocasión de la celebración del 12 de Octubre. Algunas de esas banderas fueron quemadas seguidamente.
Tras una parada ante la Jefatura de la policía española, fuertemente custodiada por los Mossos, los manifestantes han seguido calle abajo sin que se produjera ningún incidente.
Poco antes de llegar al monumento a Colón, algunos manifestantes han lanzado a tierra contenedores y han roto botellas de vidrio para dificultar el paso en los Mossos. La policía catalana ha reaccionado rápidamente y ha hecho pequeños carruseles para dispersar la protesta.
Imagen principal: Momento de la detención por parte de la Guàrdia Urbana / Sergi Alcàzar