La CUP ha denunciado que las instituciones "frustraron" la "victoria popular" que, según ellos, supuso el referéndum del 1-O de ahora hace un año. A través de un comunicado, los cupaires creen que es hora de analizar los errores y las carencias con el fin de corregirlas.

Ante la situación actual, la CUP apuesta por volver a llevar "el centro de gravedad de la acción política" a la calle sacándola de las instituciones y defiende que sólo así "habrá posibilitado reales" de volver a poner la ruptura sobre la mesa. Y es que según la formación capitalista, "la República que se forjó en la calle y en las escuelas en otoño del 2017, está a día de hoy en el congelador". Y ha avisado de que acatando las leyes y las reglas de juego nunca habrá bastante fuerza para la autodeterminación.

La CUP ha reivindicado el 1-O como una victoria popular: "Fuimos el pueblo quienes pusimos el cuerpo, la determinación, la firmeza, la solidaridad, la resistencia y la desobediencia para ejercer un derecho fundamental," defienden. Pero han lamentado que las instituciones que tenían que materializárlalo, frustraran esta victoria.

Para la CUP, la potencialidad de las acciones quedó neutralizada por "gesticulaciones simbólicas del soberanismo gubernamental" y ha puesto de ejemplo que la proclamación de la República del 27 de octubre "no tenía vocación de impacto práctico ya que no iba acompañada de ninguna medida de despliegue de la República".

Los anticapitalistas consideran que las negociaciones puestas en marcha en el marco institucional y "tuteladas por las grandes empresas y las organizaciones empresariales" no llevarán Catalunya a ejercer el derecho a la autodeterminación ni a la proclamación de la República.