La reunión del consejo general de Ciudadanos ha acabado con un duro enfrentamiento entre 'riveristas' alineados con Inés Arrimadas y las caras visibles del sector crítico -Luis Garicano, Francisco Igea e Ignacio Prendes- como no se veía desde el mes de junio después de la dimisión de Toni Roldán, según informa Voz Populi.

La reunión ha sido tan "vergonzosa", en palabras del consejero canario Javier Amador, que ha anunciado su baja del partido a los pocos minutos que ha finalizado, al comprobar que la "única estrategia" de los 'riveristas' que han vuelto a copar a la gestora es "aplastar la discrepancia".

La cumbre ha aprobado la fecha del congreso y los miembros de la gestora que dirigirán el partido hasta marzo, prácticamente todos ellos alineados con Arrimadas. Según Voz Populi, el voto de la fecha del congreso -el 15 de marzo- ha pasado sin problemas, pero la composición de la gestora ha originado un revuelo.

El interés de la dirección por votar deprisa la gestora, sin debatir los candidatos ni permitir el voto secreto, ha provocado fuerte discusión. Igea ha pedido la palabra y ha advertido que "no solamente hace falta ser liberal de puertas afuera, sino aplicárselo de puertas dentro". Su intervención no ha gustado a Carlos Cuadrado, el responsable de finanzas, que le ha espetado desde su sitio que tiene muy mal perder. "¡Que mal que lo haces!", le soltado mientras Begoña Villacís intentaba mediar y pedía a Cuadrado que "se callara".

Varias consejeras 'arrimadistas' han cargado después contra los miembros del sector crítico. Una de ellas ha asegurado que a Ciudadanos le iría mucho mejor "huir de los Cantós, los Igeas y los Prendes", refiriéndose a Toni Cantó, Ignacio Prendes y el mencionado Igea.