El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha condicionado este sábado el inicio de la negociación con el Estado a la aprobación de una ley de amnistía para los presos políticos encarcelados por el 1-O: "La única condición para iniciar la negociación con el Estado es la amnistía".
En este sentido, Cuixart, en una entrevista en la revista El Temps, ha valorado que "la legislatura de la represión debe terminar con la aprobación de una ley de amnistía". Para ello, ha indicado que aún se está a tiempo para que los grupos parlamentarios la aprueben "inmediatamente".
Jordi Cuixart en la sede de Òmnium Cultural / Maria Contreras
Más gente en prisión
"Desde Òmnium Cultural siempre tendremos toda la empatía del mundo hacia aquellas personas que escojan priorizar las salidas personales, pero lo tengo muy claro que habrá más gente que entrará a la prisión" por convicciones políticas e ideológicas, ha advertido Cuixart que ha remarcado: "Hemos de ser un ejemplo para las generaciones futuras".
Además, ha considerado que el movimiento independentista, desde los partidos a las organizaciones o entidades, no pueden abandonar la vía antirepresiva: "No nos podemos desorientar constantemente con los cantos de sirena del Estado".
Por otro lado, ha reconocido que no cree que Europa fuerce a España a sentarse a negociar. Ahora bien, desde su punto de vista, si Europa condena a España por encarcelar su disidencia política, esto supondría no solo una "reparación moral", sino que también se tendría que "aprovechar el efecto pedagógico que puede tener sobre el conjunto de la ciudadanía, tanto la catalana como el resto de España".
Además, el presidente de Ómnium ha expuesto que espera que también se condene a España por no haber investigado la violencia perpetrada por sus fuerzas de seguridad durante el referéndum del 1-O. "Ha infligido claramente todos los tratados internacionales que tiene firmados. Más de mil heridos y ningún condenado: esto es muy grave".
Al ser preguntado sobre si volvería a repetir los hechos del 1-O de 2017 -por los que está en prisión-, Cuixart ha defendido que tiene "todo el derecho del mundo a seguir luchando por una sociedad mejor y más justa, y por la república catalana".