La desafortunada afirmación por parte del jefe del Estado Mayor en rueda de prensa informando que la Guardia Civil trabaja para "minimizar el clima contrario a la gestión de la crisis del gobierno [español]" sigue haciendo correr ríos de tinta.

El mismo día que ha trascendido que el pasado 15 de abril el máximo responsable del cuerpo solicitó a sus comandancias que monitorizaran informaciones "susceptibles de generar estrés social y desafección en las instituciones de gobierno", el protagonista de la polémica se ha justificado afirmando que no se persigue la crítica política. Horas después, la ministra-portavoz del gobierno de Pedro Sánchez, María Jesús Montero, ha insistido en que todo responde a "un lapsus".

Si ayer sus compañeros del gabinete técnico de la Moncloa se fundían en un aplauso público durante la comparecencia diaria sobre la evolución del coronavirus en España, hoy ha sido la portavoz y mano derecha del presidente la encargada de defender la figura del jefe de la Guardia Civil, José Manuel Santiago. "Es un técnico y un profesional riguroso", ha apuntado a María Jesús Montero. Y ha añadido, en la línea de lo que ya afirmó Marlaska, que el mismo general "ha transmitido que fue un lapsus".

La ministra ha destacado que el ejecutivo agradece el trabajo del general y ha pedido que no se dé "tanta importancia a una cuestión menor como esta". Ante las dudas de los medios de comunicación, ha dejado claro que su gobierno garantiza la "libertad total de expresión" y que eso no quita que sea imprescindible "perseguir y denunciar las noticias fake que provocan alarma social injustificada". Montero ha concluido que "cualquier otra interpretación está fuera de contexto".