La comisión de investigación del 1 de octubre, impulsada por la CUP y con el apoyo de ERC, JxCat y los comunes, ha asegurado que citarán a votantes que vivieron "en primera persona la violencia física y psíquica", los responsables de la represión institucional para que "expliquen y justifiquen sus actos", y también recogerán los análisis de expertos sobre las consecuencias de la violencia.

El diputado de la CUP Vidal Aragonés ha subrayado que aparte de analizar las estrategias del Estado para detener el referéndum, la comisión cree firmemente que hay más heridos que las 1.066 personas que recoge el Departament de Salut. Por este motivo, tienen la voluntad de que el Parlament de Catalunya disponga de una "cartografía amplia de todos los efectos y un estudio de formas de reparación ante los daños sufridos por todos los catalanes".

1-O referendum policía Nacional - Sergi Alcazar

Carga policial contra un votante del 1 de octubre. / Sergi Alcàzar

Tanto la diputada de ERC Irene Fornós como el vicepresidente del Parlament, Josep Costa (JxCat), han destacado la importancia de poder visionar en el marco de la comisión de investigación las imágenes que no se han podido ver a lo largo de los meses de juicio en el Supremo. Asimismo, Costa ha explicado que acordaron que "lo más adecuado" era que la comisión se pusiera en marcha cuando acabara el juicio.

Por su parte, el diputado de los comunes Lucas Ferro ha denunciado que el 1-O quiso ser un "castigo ejemplarizante" y que no quería cumplir ninguna decisión judicial, sino "aleccionar". En este contexto, ha recordado que el Ayuntamiento de Barcelona, liderado por los comunes, se ha personado como acusación popular en numerosas denuncias por cargas policiales del 1-O.