Contradicciones entre la Comisión Europea y el Gobierno sobre la crisis del Open Arms. En una rueda de prensa celebrada este martes, el portavoz de la Comisión Europea Carlos Martin Ruiz de Gordejuela ha asegurado que no han recibido ningún tipo de petición de ningún país para coordinar el desembarque de los 121 migrantes que llevan cinco días en el Mediterráneo a bordo del Open Arms.

De esta manera, la versión europea deja al descubierto que las palabras expresadas este lunes por el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, no han ido más allá de declaraciones ante los medios de comunicación. El ministro aseguró que la posición de España ante la crisis era emplazar a la Comisión a coordinar el recibimiento de los migrantes y repartirles por varios estados miembros. Sin embargo, desde Moncloa no se habría hecho ninguna petición formal a la Comisión Europea para sacar adelante este plan.

Escuchad la respuesta del portavoz de la Comisión a partir del minuto 3:50.

Preguntado por la crisis, Ábalos aseguraba ayer ante los medios que España "apelaba a la Comisión Europea" para que interviniera, cosa que, como se ha visto, no se ha trasladado al terreno institucional. "La inmigración es una política de la Comisión Europea", se defendía, añadiendo que "España está haciendo un esfuerzo de contención de la inmigración muy importante".

El Open Arms rescató el pasado jueves 1 de agosto 124 migrantes de dos pateras diferentes que navegaban a la deriva en pleno Mediterráneo Central. Desde entonces, sólo tres mujeres pudieron ser evacuadas en puerto italiano a causa de su adelantado estado de gestación. La ONG ha solicitado en varias ocasiones desembarcar en puerto seguro sin recibir, hasta ahora, una respuesta positiva por parte de un estado europeo.

Por el contrario, el president de la Generalitat, Quim Torrapuso a disposición de la ONG los puertos de Catalunya para acoger los migrantes. "Ante situaciones de bloqueo como el actual, los puertos de Catalunya siempre estarán a vuestra disposición", comentó. A su propuesta, se han sumado otros gobiernos que se han abierto a colaborar en la acogida de los migrantes como el País Vasco, Valencia y Extremadura.