La alianza se repite. La dirección barcelonesa del PSC y Units per Avançar han hecho público lo que todo el mundo se esperaba: las dos formaciones contribuirán a las elecciones municipales 2023 bajo el mismo paraguas. A lo largo de estos cuatro años de mandato, las relaciones entre los dos grupos han sido fluidas y sin crispación. Tanto es así que el entendimiento se exportó también al Parlament con las elecciones del 14-F, permitiendo al exconseller de Interior y secretario general de Units, Ramon Espadaler, hacerse un sitio entre los escaños socialistas. En Barcelona, el pacto será beneficioso para otro nombre propio del partido post-Unió: el actual teniente de alcalde de Seguridad, Albert Batlle, repetir a la lista con que el alcaldable del PSC, Jaume Collboni, se presentará a las elecciones.

El exdirector de los Mossos d'Esquadra ocupó la tercera posición a los últimos comicios, pero desde ya hacía días había asumido que no podría repetirse este escenario: el fichaje estrella de Maria Eugènia Gay como número 2 de la candidatura socialista desbancó Laia Bonet, situándola en una obligada tercera posición. Durante la rueda de prensa de hoy, no se ha confirmado la plaza que ocupará Albert Batlle, pero ya se sabe que tendrá que conformarse con un puesto más bajo, especialmente teniendo en cuenta que también se tiene que encontrar la manera de meter otro fichaje, el exlíder de los comuns, Lluís Rabell.

En todo caso, para compensar este paso atrás, Collboni le ha garantizado una promoción particular en caso de que el PSC gane las elecciones y llegue a la alcaldía: Batlle dejará de ser concejal de Sarrià-Sant Gervasi para pasar a ocuparse del distrito de Ciutat Vella. Y siempre pilotando el área de Seguridad, en la cual durante esta legislatura ha tenido libertad para reforzar el cuerpo con 1.000 nuevos agentes de la Guàrdia Urbana y actuar con mano de hierro para hacer frente a fenómenos como el botellón, el top manta, los bicitaxis y la multirreincidencia en los hurtos. El desplazamiento de Alcalde desde el distrito más rico de la ciudad hacia uno de los más pobres y problemáticos tiene, precisamente, la intención de ser "un nuevo reto" y reivindicar a los socialistas como sólidos en materia de seguridad mientras intentan distanciarse de Ada Colau en la carrera electoral.

"Una suma que multiplica"

El acto de unión entre los dos partidos se ha escenificado esta tarde. En su intervención, Jaume Collboni ha resaltado la centralidad del PSC y la pluralidad de una lista con nombres potentes. Para el socialista, el acuerdo firmado evidencia el potencial de "dos fuerzas políticas diferentes con voluntad de encontrar aquello que compartimos". "Creemos que la política es eso: buscar acuerdos desde la diferencia, porque sabemos y queremos poner por delante el interés de Barcelona y Catalunya". Y ha defendido que el PSC es "la opción con más capacidad para sumar sensibilidades y visiones diversas porque tenemos un valor prioritario: hacer prosperar Barcelona en favor de todos y todas las que vivimos allí y trabajamos".

Por su parte, Albert Batlle ha remarcado que, después de cuatro años de trabajo conjunto, hoy son "la primera bastante política en Catalunya". "Y pronto lo seremos en Barcelona", ha lanzado. Y ha añadido: "¿Os imagináis lo que podría ser un gobierno presidido por el alcalde Jaume Collboni que representara la totalidad de Barcelona, al margen de la lucha partidaria? Barcelona daría un salto adelante". "PSC-Units es una suma que multiplica", ha concluido.