La exconsellera Clara Ponsatí ha presentado este sábado su nuevo libro Muchos y nadie en Perpinyà, coincidiendo así con el día de su cumpleaños. La eurodiputada de Junts ha agradecido a través de Twitter tanto a todas las personas que se han acercado a apoyarle en esta presentación como a la librería que ha organizado el encuentro y al casal de Perpinyà. En las páginas del libro de corte autobiográfico, que pretende "explicar la persona que hay detrás del personaje público", Ponsatí carga contra la respuesta del Govern al 1-O y contra la actitud de los partidos independentistas, a los cuales esta misma semana describía como "herramientas que no son útiles". Ser la conciencia crítica del independentismo tiene un precio, y por este motivo ningún responsable político asistió la semana pasada al acto de presentación de la obra de la consellera que vive en el exilio.
El libro de Ponsatí ha servido de excusa para que exponga su diagnóstico sobre la salud del independentismo y para criticar la respuesta política del Govern ante los impulsos judiciales contra la inmersión lingüística. En este sentido, asegura que la visión sobre el movimiento independentista que expresa en el libro intenta ser optimista, pero admite que el movimiento está "muy atascado" y en situación "de encenagamiento", avisa de que lo que describe como "política de renuncia" ha descapitalizado las fuerzas del independentismo, y que aunque considera que es mayoritario ahora mismo no tiene "las herramientas políticas para materializar otro embate".
Independencia
Clara Ponsatí aseguró este jueves que la independencia de Catalunya es tan importante como para valer la vida de una persona, aunque no se muestra favorable a la violencia. En una entrevista en el programa Café de Ideas de Radio 4 y La2 consideró "paternalista" que después del 1-O se dijera que no se tiraba hacia adelante la independencia porque podría haber muertos. Para Ponsatí, esta afirmación constata que "no se hará nunca". La eurodiputada defensa que morir por una causa "no es una situación extraña" en el curso de la historia y utilizó de ejemplo como el pueblo ucraniano se defiende "saliendo a la calle con las manos vacías". Se trata, según Ponsatí, de una actitud "respetable y admirable". Sin embargo, afirma que la situación de Ucrania no es comparable con la de Catalunya.
En la misma entrevista, preguntada directamente si estaría dispuesta a morir por la independencia de Catalunya, la exconsellera exiliada aseguró que "evidentemente lo intentaría evitar por todos los medios" añadiendo que "no es una situación extraña" en el transcurso de la historia. Ponsatí admite, pero que no conoce a ningún líder de partidos o entidades independentistas que haya dicho que la independencia de Catalunya es tan importante como para valer la vida de una persona y considera que se tendría que hacer esta pregunta a mucha más gente.