La primera empresa de cementos catalana, Cementos Molins, ha aprobado este viernes en una reunión del consejo de administración trasladar su sede social a Madrid. La incertidumbre generada por la situación política catalana ha provocado que el cambio de domicilio social, de Sant Vicens dels Horts a la capital del Estado, se haya hecho efectivo.

En el comunicado emitido por la compañía se justifica la medida para proteger los intereses del grupo y mantener la normalidad en su operativa. En él, también se afirma que el cambio de sede viene derivado por "la actual situación política y social que se vive en Catalunya y debido a la inseguridad que eso provoca".

Cementos Molins ha reafirmado su compromiso con el mantenimiento de la actividad y también de sus sedes sociales en las sociedades industriales del grupo situadas en Catalunya, es decir, Cementos Molins Industrial, Promsa y Propamsa. El año pasado facturó 691 millones de euros y obtuvo un beneficio neto de 64 millones. La compañía, que mantiene una presencia industrial importante en Catalunya, está fuertemente internacionalizada, con plantas de producción en Latinoamérica, Asia y el norte de África.