El consejo del Departament dels Pirineus Orientals, perteneciente a la Catalunya Nord, ha pedido al presidente francés y copríncipe de Andorra, a Emmanuel Macron, que posicione en la prohibición del aborto en el Principado y que "influya en el gobierno de Andorra" para su despenalización. Según informa el Diari de Andorra lo hizo este jueves, después de que la mayoría de fuerzas de izquierdas en el gobierno aprobaran una "moción de apoyo a todas las mujeres andorranas que hacen campaña por el derecho al aborto en el Principado". Además, en esta moción también se muestra el apoyo hacia la presidenta de Stop Violencias, Vanessa Mendoza Cortés, "portavoz de todas las mujeres andorranas que no pueden abortar en su país". Los dos representantes de la extrema derecha en el Consejo, Louis Aliot, alcalde de Perpinyà, y Carla Muti, los dos de Reagrupamiento Nacional, se abstuvieron en la votación.

Aborto ilegal en Andorra

El aborto en Andorra es ilegal en cualquier supuesto y está castigado con penas de prisión. El Principado se ha convertido en una excepcionalidad en el marco de Europa, junto con la minúscula ciudad Estado del Vaticano, donde también está prohibido la interrupción del embarazo. En el marco de la Unión Europea solo está prohibido en Malta.

En Andorra, el aborto está explícitamente prohibido en todos los supuestos, incluidos los casos de violación, de malformación del feto y de riesgo para la salud de la madre. La Constitución de 1993 reconoce el derecho en la vida y "la protege plenamente en sus diferentes fases". El Código Penal, aprobado en el 2005, reconoce el aborto dentro de los "delitos contra la vida humana prenatal" y distingue tres casos: el no consentido, el consentido y el imprudente. Para el primer caso, se prevén penas de prisión de 4 a 10 años. Además, la tentativa de los hechos también es considerada como delito. En el caso de las interrupciones del embarazo consentidas, el texto es contundente y dice que quien produzca el aborto de una mujer con su consentimiento "tiene que ser castigado con pena de prisión de tres meses a tres años e inhabilitación para ejercer cualquier profesión sanitaria por un periodo hasta cinco años". La ley no contempla excepciones, pero según el principio de necesidad es permitido abortar para salvar la vida de la embarazada.

"Avanzar en el derecho de las mujeres"

Xavier Espot fue investido el pasado mes de mayo como jefe de gobierno de Andorra con los votos favorables de los dieciséis consellers de Demócratas (DA), partido que ganó las elecciones del 2 de abril por mayoría absoluta. También obtuvo el apoyo del representante de Acció, una escisión de Liberales de Andorra (El A) que cuenta con un conseller a través de una coalición con DA en Escaldes-Engordany. Con respecto al aborto, el nuevo jefe de gobierno remarcó que se quiere trabajar para mantener la estructura institucional del coprincipado, avanzando en los derechos de las mujeres. En este sentido, afirmó que la voluntad es poder "eximir" las de responsabilidad cuando interrumpan su embarazo dentro de unos supuestos y unos plazos.

Por su parte, el líder de Concordia defendió el poder de decisión de las mujeres e indicó que "el primer paso a llevar a cabo de forma ágil es proceder a la despenalización de la práctica, examinando posteriormente la legalización". Escalé apuesta por poder compatibilizar la estructura del coprincipado con el aborto.