El Ministro de Justicia, Rafael Català, amenizó la espera de la sentencia de la trama Gürtel jugando a tenis días antes con el abogado del Partido Popular, Jesus Santos.

Catalá y Santos se reunieron en el Club de Campo Villa de Madrid, según informa el diario digital El Plural. Los habituales del club no pasaron por alto el encuentro en un momento en el que el Partido Popular se encuentra en una de las situaciones más delicadas en los últimos años. La financiación ilegal del partido confirmada en la sentencia de la trama deja al partido muy tocado y casi hundido por la moción de censura propuesta por el PSOE.

Mariano Rajoy se ha desmarcado de la reunión igual que de la sentencia. El Presidente no ha querido opinar sobre un hecho que puede poner en entredicho la independencia entre la justicia y la defensa del PP.

El polémico partido de tenis puede generar una gran sospecha sobre todo ahora que se ha sabido que la mujer de Bárcenas, Rosalía Iglésias, no entrará en la cárcel por el momento. Al parecer no ingresará de forma preventiva porque, según han informado medios de la capital española, el extesorero del PP podría hacer nuevas revelaciones sobre la financiación ilegal del partido.

Jesús Santos no es abogado de oficio

El defensor del Partido Popular es uno de los juristas más prestigiosos del país y experto en la Ley de Enjuiciamiento Criminal. Su especialización en esta ley se debe a su anterior etapa como exteniente fiscal de la Audiencia Nacional.

Santos, además, no se puede quejar de sueldo. El letrado se lleva más de 300.000 euros y es la mano derecha de Cospedal en el Caso Gürtel.

Un punto de encuentro discreto y exclusivo

El lugar de encuentro entre el ministro y el abogado es un punto de referencia al que suelen acudir las diferentes personalidades de los grupos políticos y económicos de España.

Aunque  no es de los sitios más exclusivos de Madrid, hace tiempo que se ha convertido en un punto de reunión habitual para las clases más altas. Seguramente, la discreción del lugar es uno de los factores claves para que Catalá y Santos decidieran encontrarse allí.