Antoni Castellà, portavoz de Demòcrates y diputado en el Parlament, ha propuesto este sábado que los cargos del Govern y de la Mesa del Parlament que estén encausados -o que lo sean en un futuro- sean relevados por nuevas personas que no tengan ningún proceso legal abierto. Lo ha dicho en una entrevista en El Suplement de Catalunya Ràdio.

Sin embargo, Castellà ha destacado la necesidad de poner en una balanza, por una parte, el mensaje político y, por otra, la capacidad de tarea ejecutiva de los nombramientos. En el caso del presidente Carles Puigdemont y del resto del gobierno legítimo, asegura que "pesa mucho más la restitución" y que así se hará con "todo aquel que quiera".

Una vez restituido el Govern, el de Demócratas vería "muy interesante" poner "una línea de cargos no encausados detrás" y, si fuera necesario, "una segunda o una tercera línea". Si los nuevos cargos también fueran encausados, ha defendido "no llevarlos al extremo, sino sustituirlos".

Castellà ha coincidido así con la argumentación de la expresidenta del Parlament Carme Forcadell que esta semana renunció a volver a presidirlo para dar paso a alguien "libre de procesos judiciales". En este sentido, ha explicado que eso "le ha planteado dudas" sobre quiénes tienen que ser los integrantes del Govern y de la Mesa, aunque sabe que defendiendo esta posición pueden aparecer contradicciones.

Sobre la posibilidad de que el relevo tenga que ser continuado a causa de repetidas imputaciones, Castellà ha asegurado que "dependerá del gobierno español". "¿Qué encausaremos, a miles de personas? Eso es generar un conflicto enorme y la decisión de generarlo será del Estado, no nuestra", ha defendido.

Vía Puigdemont

El nuevo gobierno, según defiende, se tiene que encargar de hacer realidad la república porque "renunciar a la idea de la república sería traicionar a la voluntad del pueblo de Catalunya". Para conseguirlo, el diputado ha asegurado que no renuncia a la vía unilateral porque hacerlo sería como "renunciar al objetivo final del programa electoral". "Lo único que no te puede robar el 155 es la voluntad política", ha insistido.

Para presidir el gobierno que tiene que implementar la república, Castellà ha llamado a "agotar hasta al final" la vía de investir a Puigdemont y ha defendido la viabilidad de una investidura telemática. "En el siglo XXI puedes comprar un piso con bitcoins pero investir a un presidente telemáticamente, es ridículo".

En cuanto a los diputados en Bruselas, ha vuelto a insistir en la necesidad de que renuncien al acta "antes de que el Parlament quede en manos de Rajoy" y que, en la formación de gobierno, sean nombrados consellers.

En relación a la presidencia de la Mesa del Parlament, Castellà ha afirmado que no se ha estudiado su nombre: "A todos nos haría ilusión, pero no hemos hablado de que yo pueda serlo".