El CNI no piensa entonar de ninguna manera el mea culpa que el mismo presidente español, Pedro Sánchez, ha reconocido que han tenido los servicios de inteligencia españoles cometiendo "errores claros de seguridad".

Así pues, el relevo al frente de esta institución se ha celebrado de forma solemne esta mañana y la nueva directora del CNI, Esperanza Casteleiro, ya ha dado un aviso para navegantes: "Las amenazas a la paz y a la seguridad, exigen al CNI una alta capacitación tecnológica para proporcionar protección y seguridad a las comunicaciones en el conjunto de la sociedad".

Subraya la "transparencia" del CNI

Así pues, mensaje entre líneas que ha tocado de lleno el aspecto que ha llevado a la destitución de la anterior responsable, Paz Esteban, y la firme convicción en que las actuaciones del CNI han estado proporcionadas y justificadas, también el espionaje del CatalanGate.

Donde sí ha hecho toda una declaración de principios que sonaban a una justificación para admitir ciertos errores en el espionaje a La Moncloa, ha sido en la segunda parte de su discurso: "Se exige una nueva orientación, la máxima cooperación, transparencia y alta capacidad tecnológica. Espero tener la sabiduría y el acierto necesarios por, encima de todo, no decepcionar la confianza que hoy se deposita en mí". Un mensaje claramente dirigido a la ministra de Defensa, Margarita Robles, que ha sido quien ha apostado por ella y ha cerrado filas con un entorno de su máxima confianza en los organismos de los cuales cuelgan de su ministerio.

Casteleiro, que últimamente ostentaba el cargo de secretaria de estado, ha admitido su ilusión por "volver al centro" donde ha desarrollado toda su carrera y donde ha admitido que ha entregado "con mucho gusto" la mayor parte de su vida. Y ha concluido: "Si volviera a nacer, no dudaría en repetir este itinerario". El discurso ha acabado alabando la figura del rey Felipe VI a quien ha prometido su máxima fidelidad y el compromiso de seguir punto por punto lo que marca la Constitución, tal como marca la tradición.

La historia de Casteleiro

Nacida en Madrid en 1956, Esperanza Casteleiro es hija del militar franquista Antonio Casteleiro que, en enero de 1974 y cuando era coronel de Aviación, fue condecorado con la gran cruz del Mérito Naval con distintivo blanco por el dictador Francisco Franco. Si tiramos de hemeroteca, precisamente en enero de 1974, un mes después de que ETA asesinara a Luis Carrero Blanco, que en 1972 había puesto en marcha el SECED, en España había tres agencias de inteligencia: el SIAEM, el SIPG y el SECED. En 1977, en plena Transición, fueron unificados y reconvertidos en el CESID, y en el 2002 pasó a llamarse CNI.