La reciente decisión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) sobre el condenado por terrorismo Xabier Atristain podría servir de doctrina al resto de los presos de ETA. Se trata de una sentencia, ya firme, donde el tribunal europeo reconoce que negarle asistencia legal durante el régimen de incomunicación viola el derecho fundamental a la defensa y a un proceso judicial justo, y que las confesiones que el preso hizo durante este tiempo acabaron siendo fundamentales en su condena en España. Después de desestimar el recurso de la Abogacía del Estado sobre la sentencia unánime de Estrasburgo que ha condenado a España a indemnizarlo con 20.000 euros, entre daños morales y gastos, al letrado de Atristain, Zigor Reizabal, cree que la decisión "pone en cuestión" el régimen de incomunicación de los presos, y que el juicio fuera "justo" y "equitativo". Es por eso que el abogado considera que la jurisprudencia de este caso se podría aplicar a "decenas" de presos de ETA más, con quien las autoridades españolas habrían seguido el mismo modus operandi a la hora de tomar declaración. A pesar de todo, el ministerio de Justicia aseguró a la Asociación de Víctimas del Terrorismo (ATV) que la sentencia no sería aplicable a otros condenados de ETA. El primer test para saber si el caso Atristain será doctrina vendrá de la mano de una de las líderes de ETA, Iratxe Sorzabal, que ya ha pedido al Tribunal Supremo que se revoque su condena de 24 años y medio de prisión porque también pasó cinco días de incomunicación donde dice que declaró bajo "presión, coacción y torturas".

El TEDH condena España

El letrado Reizabal cree que la privación al derecho a la defensa, tal como lo ha identificado el TEDH por unanimidad en el caso Atristain, "es algo común en todos los [presos de ETA] que cumplen condena actualmente", ha explicado al medio vasco Naiz. De hecho, cree que hay "miles y miles" de presos que han pasado la misma situación de incomunicación que su cliente: "Por eso esta decisión trasciende el caso concreto y tiene que ser aplicable a todos los presos y presas vascas que están una situación equiparable, la práctica totalidad de los cuales cumplen condena hoy día", ha opinado. Según Reizabal, la vía que tienen que seguir los presos afectados por la misma situación para revertirlo es "un recurso de revisión al Tribunal Supremo". A partir de aquí, el abogado cree que el Supremo tiene que declarar nula la sentencia y dejarlos en libertad. Esta es la línea que seguirá Atristain, y de la cual intentará beneficiarse Sorzabal. Reizabal ha querido destacar como los hechos examinados por el TEDH "son los mismos que se analizaron a [...] la Audiencia Nacional, el Supremo y el Constitucional. La diferencia radica en las lentes con que se miran: dónde las lentes de España no vieron nada, las lentes del TEDH lo han visto todo, y en una sola vez".

¿Doctrina Atristain?

De momento, Sorzabal ha argumentado que, como en el caso de Atristain, no se respetaron las garantías que establece el TEDH al haber estado también en la misma situación de incomunicación y no haber tenido la oportunidad de escoger abogado, según precisan las fuentes consultadas por EuropaPress. Indica que la sentencia de la Audiencia Nacional ha violado diversos de sus derechos, como el de la tutela judicial efectiva al haber declarado "bajo presiones, coacciones y torturas" durante el periodo de cinco días de incomunicación, y vulnera asimismo su derecho a la presunción de inocencia. Argumentos que no comparte la Asociación de Víctimas del Terrorismo, acusación en la causa, que subraya en su escrito de oposición que las declaraciones de Sorzabal en sede policial no fueron valoradas como prueba, y añade que el tribunal concluyó que no había quedado "plenamente acreditada la existencia de estas torturas y presiones".