El conseller de Interior, Miquel Buch, ha respondido a la alcaldesa de Barcelona de que "en materia de seguridad y emergencias no se pueden tener actitudes erráticas, negligentes o irresponsables". Esta contundente réplica del conseller llega después de que Ada Colau asegurara este martes que si el Ajuntament se había relajado con el top manta, como había indicado Buch, Interior estaba "en coma".

No obstante, Buch ha insistido en una rueda de prensa que celebra el "cambio de actitud" del consistorio. De esta manera, ha defendido que la actitud de los Mossos ha sido "siempre la misma" y que "en ningún caso" han abandonado la ciudad, y ha recordado que con varias operaciones se está combatiendo la situación para "cambiar" los datos delincuenciales de la ciudad.

Ha puesto como ejemplo el desmantelamiento de varios narcopisos, el golpe a una red de vendedores ambulantes que traficaba con drogas y la detención de un grupo que presuntamente financiaba terroristas.

El conseller ha explicado que los Mossos d'Esquadra reforzarán el dispositivo habitual de seguridad con efectivos de la Brigada Móvil (Brimo) y con unidades del Área Regional de Recursos Operativos (Arro), ya que "el cuerpo tiene 2.000 agentes menos de los que tendría que "tener".

También ha expuesto que han pedido al consistorio que la oficina conjunta entre los cuerpos policiales esté "en planta cero" y si está en el subsuelo se tienen que garantizar las medidas de seguridad. Ha remarcado que tiene que servir para incrementar la "proximidad" de los agentes con la ciudadanía.