El conseller de Interior, Miquel Buch, ha animado este miércoles a los Mossos d'Esquadra que no dejen de ser el cuerpo policial del cual los catalanes se sienten "orgullosos", "pase lo que pase y más allá de críticas excepcionales, temporales y puntuales", y les ha pedido que no cambien de modelo de seguridad.

Buch también ha admitido que aunque la autoevaluación interna de los Mossos es "constante", la sociedad "quizás no la conoce lo suficiente". Así, ha elogiado a la policía catalana, recordando que es la segunda institución más valorada por los catalanes, según el último CEO, y asegurando que su modelo policial se basa en la excelencia, la proximidad, la mediación y la autoevaluación. En este sentido, ha dicho que todo el mundo puede cometer errores, pero el principal acierto es reconocer este error y corregirlo.

Buch ha asegurado que la policía catalana tiene la capacidad y el talento, y también las herramientas, que si hace falta reforzará la Generalitat, para afrontar los retos de seguridad de Catalunya. Además, ha reiterado que el cuerpo tiene su confianza como conseller, sobre todo para mantener un modelo público de seguridad propio.

Buch lo ha dicho durante la inauguración de las quintas jornadas internacionales de crimen organizado, centradas en el tráfico ilícito. Desde este miércoles hasta el viernes, habrá ponencias y charlas de expertos policiales, juristas, criminólogos y otros sobre el tráfico de drogas, con ejemplos de Galicia, Gibraltar, Holanda y México, sobre el tráfico de inmigrantes, de datos informáticos, de armas y de dinero.

El conseller ha dicho que el crimen organizado representa un reto para la policía y la sociedad y que actualmente tiene el peligro de su constante renovación y la internacionalización. Entre los diversos elementos de tráfico, Buch ha destacado que para él uno de los más graves es el de tráfico de personas para la explotación laboral, sexual o de tráfico de órganos.