El propuesto jefe de la diplomacia europea y todavía ministro en funciones de Asuntos Exteriores español, Josep Borrell, no se ocupará "de asuntos internos como Catalunya", en el ejercicio de su nuevo cargo.

Así lo ha asegurado este miércoles en Ser Catalunya después de ser nominado por la Unión Europea para ocupar el cargo de alto representante para la política exterior comunitaria. Aunque Borrell no ha querido hablar todavía como representante europeo por "respeto a la Eurocámara" que lo tiene que ratificar, ha indicado que su función no será la de ocuparse "de los asuntos internos de los países miembros, como del caso del Catalunya". En el mismo sentido, ha apuntado que el nuevo cargo no le servirá para "tener más fuerza para bloquear el crecimiento del procés".

"Es evidente que no estoy a favor de la independencia de Catalunya", ha afirmado después de que se le haya recordado que la prensa internacional lo ha presentado como un símbolo antiindependentista. Así ha evidenciado que sacará importancia al conflicto de Catalunya con el Estado español desde el nuevo cargo y que no será un punto en su agenda de política europea.

La línea de actuación de Borrell se encaminará a conseguir una Europa "con objetivos conjuntos". El ministro ha manifestado la convicción de que "el mundo necesita una Europa más presente" y que la política exterior refleja la visión que cada país tiene del mundo. "La tarea ahora es aproximar estas visiones para actuar con objetivos conjuntos", ha afirmado.

"Propaganda independentista"

En referencia a la petición en el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya de cerrar cautelarmente las delegaciones del Govern en Berlín, Londres y Ginebra, Borrell ha argumentado que estas "son instrumentos de propaganda independentista".

"Si una administración pública cree que otra no cumple con lo que tiene que cumplir, ¿qué tiene que hacer? Pues explicarlo a los tribunales", ha asegurado Borrell.

El ministro ha recordado que cada comunidad autónoma tiene competencias de proyección exterior con 15 delegaciones, pero las catalanas "se dedican a hacer acciones que no corresponden a esta competencia". "No podemos mirar hacia otro lado y hacer ver que no nos enteramos de nada", ha justificado apelando que su "responsabilidad administrativa" era traspasar el caso a los tribunales.

Borrell también ha hablado de las negociaciones por la investidura y ha reiterado que "el presidente del gobierno en funciones y los miembros del partido socialista han dicho por activa y por pasiva que no ven un gobierno de coalición".

Sobre las acusaciones del PSOE de aliarse con el independentismo, Borrell se ha calificado como máximo exponente que no son ciertas y ha lamentado que Ciudadanos no haya conseguido ser "el partido liberal que necesita España para complementar las mayorías de los dos grandes bloques sin dimensión territorial".

En la entrevista, el ministro en funciones ha defensado que renunció a ser eurodiputado por no dejar vacante el ministerio de Exteriores, ya que al estar en funciones no se le podía sustituir. Además, ha argumentado que habría supuesto marchar de vacaciones teniendo en cuenta que el Parlamento Europeo cerrará en unos días. Pero, según ha afirmado, esta decisión no excluía de que pudiera ser propuesto para una función ejecutiva, como ha acabado ocurriendo.