Hoy por hoy, Junts per Catalunya no está en posición de facilitar la investidura de Pedro Sánchez. Así lo ha advertido su portavoz, Laura Borràs, después de reunirse con la portavoz socialista Adriana Lastra en el Congreso de los Diputados. La dirigente de JxCat lo ha justificado en el contexto actual, con la suspensión de sus tres diputados presos. "Los cheques en blanco ya los hemos concedido. Un año después, estamos en la situación en la que estamos", ha lamentado.

En la rueda de prensa posterior a la reunión con Lastra, donde también ha asistido la diputada Míriam Nogueras, la portavoz de JxCat ha insistido en varias ocasiones que "en este momento no se dan las circunstancias para facilitar la investidura". Lo ha hecho después de que la dirigente socialista les haya pedido que no la bloqueen, un extremo donde el grupo independentista no quiere llegar.

En este sentido, Laura Borràs ha denunciado que "somos 350 diputados, pero no somos 350 diputados a las comisiones", y ha exigido "poder votar plenamente como grupo". Además, ha constatado que, consecuencia de la suspensión como diputados, "hay tres votos que no podrán ser negativos", aunque JxCat vote en contra.

Para que esta posición cambie, la dirigente de JxCat ha pedido "respeto y no suspensión de nuestros compañeros diputados". En este sentido, ha reivindicado que lo que quieren es diálogo. "Necesitamos que haya alguien en el otro lado", ha precisado Laura Borràs.

"No hemos venido a bloquear, sino a desbloquear el diálogo y la democracia", ha defendido después de la reunión con Adriana Lastra. Y ha hecho referencia a la última palabra de los acusados del juicio del 1-O: "Como decían en sus alegatos finales, este es un conflicto político que quien gobierne el Estado español no puede hacer oídos sordos".