El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, sigue estando en el foco de la polémica desde el domingo después de su lamentable comportamiento con la jugadora de la selección española femenina, Jennifer Hermoso, a la cual dio un beso sin su consentimiento en la celebración del título del Mundial femenino. La Federación convocó el martes una asamblea urgente para debatir el futuro de Rubiales, que se celebrará este viernes y de donde se espera que se decida alguna sanción, o directamente, la destitución del presidente de la institución. Precisamente, sobre esta reunión ha hablado este jueves el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, que ha asegurado que esperan que "se produzcan acontecimientos", y ha amenazado con que en caso de no producirse, el Gobierno actuará.

Bolaños ha aprovechado esta cuestión para destacar el "cambio" de la sociedad española de los últimos años: "A la sociedad española ya le parece intolerable que haya comportamientos machistas, que se bese a una mujer sin su consentimiento". Por eso, ha reivindicado el orgullo de la sociedad española, que "no tolera comportamientos machistas y que se avergüenza cuando se producen los comportamientos que se vieron aquel día".

El Gobierno carga contra Rubiales

El ministro de Cultura y Deportes en funciones, Miquel Iceta, se ha mostrado crítico con Rubiales desde el inicio de la polémica, tanto es así, que ha amenazado con decidir él mismo sobre el futuro de Rubiales si la RFEF no actúa contra él. "Tienen que tomar decisiones, si no las toma la Federación, lo hará el Consejo Superior de Deportes (CSD)", afirmó Iceta. El ministro explicó, en nombre del CSD, órgano de la administración adscrito al Ministerio de Cultura y Deportes, que activarán "todos los mecanismos a partir de denuncias ya presentadas" a partir de la próxima semana. Según relató, el organismo tiene un procedimiento por el cual "se elevan denuncias al CSD o en el Tribunal Administrativo del Deporte, y allí se sustancian los expedientes".

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, también se ha mostrado contundente contra el gesto del presidente de la RFEF, al calificarlo "de inaceptable". Sánchez aseguró este martes que las disculpas que ha dado no son suficientes "incluso creo que no son adecuadas", y por esta razón, ha instado al presidente de la RFEF a "seguir dando pasos para aclarar lo que vimos todos".

Tres denuncias para Rubiales

La Fiscalía General del Estado (FGE) ya ha recibido tres denuncias contra Rubiales, por el beso forzado en la boca en Hermoso. El Ministerio Público cuenta ya con tres denuncias sobre la mesa presentadas por tres particulares que piden que se investigue a Rubiales, quien acumula frentes abiertos en el Consejo Superior de Deportes y el reproche público de varias formaciones políticas, así como de la misma Jenni Hermoso, que este miércoles emitió un comunicado a través de su sindicato FUTPRO en el cual pedía "medidas ejemplares" para el presidente de la RFEF.

Según fuentes de la Fiscalía, han precisado que una de las denuncias fue presentada por el presidente de la Escuela Nacional de Entrenadores de Fútbol en España (Cenafe), Miguel Ángel Galán, quien el año pasado presentó una querella contra Rubiales que se investiga en el Juzgado de Instrucción Número 4 de Majadahonda por presuntas irregularidades en la RFEF para que el torneo de la Supercopa de España se jugara en Arabia Saudí.