La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, y la ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, han querido cerrar la polémica generada por las declaraciones del secretario del PSC, Miquel Iceta, que planteaba que si la mayoría de los catalanes quiere la independencia, la democracia tiene que encontrar mecanismos para habilitarla.

En la rueda posterior al Consejo de Ministros, Batet ha afirmado, contundente, que el "proyecto socialista combate el independentismo" y ha apuntado que el mismo Iceta "matizó sus palabras". En este sentido, ha añadido que "es conocido por todo el mundo que en el socialismo el referéndum pactado no tiene cabida".

Por otra parte, Celaá ha dejado claro que con la actual legislación española, marcada por la Constitución, "no existe" el derecho al referéndum ni a la autodeterminación. "Es una línea roja para este gobierno", ha recordado.

Miquel Iceta consideró que si el 65% de los catalanes quiere la independencia, la democracia tiene que encontrar un mecanismo para habilitarla" pero no con el 47% ni el 51%. En una entrevista en el diario Berria, Iceta defendió que en un escenario del 65%, primero se necesitaría un acuerdo en el Parlamento y después se tendría que pedir el voto de los ciudadanos.

El Gobierno defiende a Borrell

Celaá ha defendido la decisión de Josep Borrell de interrumpir unos momentos una entrevista en una televisión alemana y ha explicado que lo que hizo el ministro de Asuntos Exteriores fue "un acto de firmeza ante un interrogatorio".

Celaá ha respondido así al ser preguntada por la decisión de Borrell de interrumpir una entrevista en la Deutsche Welle cuando se habló sobre la cuestión catalana y la posibilidad de una reforma de la Constitución española.

"Usted pregunta bien, pero probablemente, por razones medioambientales quizás algún colega suyo no preguntaba, interrogaba", ha dicho la portavoz del Gobierno.

No obstante, ha dejado claro que el ministro de Exteriores volvió a la entrevista porque "puso en valor no sólo la firmeza en su respuesta, sino también el hecho de que España es un estado social y democrático de derecho, que se rige por la separación de poderes".

3.793 plazas públicas para el 2019

El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes la oferta de empleo pública más importante desde la irrupción de la crisis.

Son 33.793 plazas, según ha informado la ministra Batet, que superan las 30.840 creadas en el 2018. Según Batet, tienen que permitir suplir un número importante de jubilaciones en los próximos años entre el funcionariado y forman parte "de una auténtica política de planificación a medio y largo plazo" que entre otros analiza el estado de las plantillas y crea un plan plurianual a tres años vista.

El objetivo, según Batet, es "recuperar un nivel de empleo pública adecuado" que se había perdido durante los años del anterior ejecutivo.