Barcelona quiere que Jordi Sànchez pueda salir de la cárcel para asistir al pleno de investidura del Parlament. En una declaración institucional, ratificada por la mayoría del consistorio, el Ayuntamiento de la capital catalana ha expresado su apoyo al nombramiento presencial del candidato a la presidencia en la Cámara catalana.

La declaración ha sido presentada esta mañana mediante una lectura solemne en la Comisión de Presidència. La ha propuesto el grupo Demòcrata y ha sido respaldada por Barcelona en Comú y las demás formaciones independentistas —ERC, CUP y Gerard Ardanuy—. Como era de esperar, PSC se ha alineado con Cs y PP en contra del texto, tal como ocurrió, sin ir más lejos, con una propuesta del pleno para acercar los presos políticos a Catalunya.

 

El texto es una clara defensa de los derechos de Jordi Sànchez como diputado del Parlament. El Ayuntamiento pone de relieve que ni las leyes actuales ni el hecho que se encuentra en prisión provisional suponen un supuesto de inelegibilidad para ser investido en el cargo de president, especialmente —señalan— si tampoco se impugnó la candidatura de Junts per Catalunya en su momento.

Es más, la declaración sostiene que se podría incurrir en una "vulneración de derechos" si no se permitiera su traslado para la investidura.

Además, el consistorio subraya que la elección del president corresponde al Parlament, dejando claro que se rechaza cualquier injerencia que pudiera influir en el proceso de elección del nuevo jefe del ejecutivo. Para respaldar los derechos de Sànchez, el texto recoge artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, de la Constitución española y del Estatut de Autonomia.

Presos políticos

No es la primera vez que el Ayuntamiento de Barcelona se expresa a favor de los presos políticos. Hace unas semanas, la comisión de Presidencia del consistorio aprobó una moción en la que pedía el acercamiento a cárceles catalanas del vicepresident Oriol Junqueras y el conseller Joaquim Forn, y también del expresidente de la ANC, Jordi Sánchez, y el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.

La declaración institucional, que fue impulsada por los comunes, recibió el apoyo de todos los grupos independentistas y más tarde de los mismos familiares de los presos en un encuentro con la alcaldesa, Ada Colau.