La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, está decidida a proteger la emblemática Cruz del Valle de los Caídos y a hacerlo por ley, según ha publicado este miércoles el diario madrileño ABC. Se trata de una medida que satisfará Vox, que reclamaba protección para esta cruz. El hecho es que la presidenta madrileña y la extrema derecha temen que la nueva ley de memoria democrática sirva para demoler la gran cruz, ya que la norma establece la retirada de edificaciones "contrarias a la memoria democrática" aunque "estén ubicadas en edificios de carácter privado o religioso, pero con proyección en un espacio o uso público".

Según las informaciones de ABC, la presidenta estaría dispuesta a blindar la Cruz de los Caídos a través del proyecto de nueva Ley regional de Patrimonio. O sea, la intención es desplegar las competencias autonómicas con el fin de utilizarlas para contrarrestar la ley estatal. La norma autonómica establecerá la posibilidad de proteger, de acuerdo con criterios técnicos, las cruces y los elementos decorativos vinculados a la arquitectura religiosa.

En este sentido, según informa el rotativo madrileño, eso supondrá de facto que se abra la puerta a la posibilidad de proteger la Cruz de los Caídos, siempre que haya informes favorables de técnicos que eso lo estimen. Técnicos de la Comunidad de Madrid, se entiende. Fuentes del gobierno de Ayuso que cita el ABC señalan que hasta ahora la Comunidad tenía las manos atadas en esta cuestión porque el Valle de los Caídos (ahora renombrado con el nombre de Cuelgamuros) dispone de una protección de nivel estatal. El ejecutivo autonómico no tenía competencias para actuar.

Ayuso blinda la cruz por su valor etnográfico

Pero las cosas cambiarán si saca adelante la nueva ley que se está tramitando. El artículo 73 del nuevo texto serviría para proteger la cruz. La ley llega este jueves a la asamblea madrileña para debatir las enmiendas a la totalidad. En su articulado, la nueva norma plantea la protección del patrimonio etnográfico, concepto que incluye "todos los bienes muebles, inmuebles, inmateriales, espacios o elementos que constituyan testimonio y expresión significativos de la identidad, la cultura y las formas de vida tradicionales de la Comunidad de Madrid".

Como bienes del patrimonio etnográfico la ley sitúa "la arquitectura religiosa, incluyendo los calvarios tradicionales y las cruces, así como los elementos decorativos y bienes muebles relacionados directamente con el bien patrimonial a proteger". Es por aquí que se podrían proteger elementos de tradición cristiana como la Cruz del Valle de los Caídos. La medida satisfará Vox a la Comunidad de Madrid, que había reclamado de forma reiterada una protección especial para este elemento.