La Asociación Pro Guardia Civil (APROGC) ha pedido al Consejo de la Guardia Civil calificar como "zona conflictiva" Catalunya, como se hacía con el País Vasco y Navarra mientras operaba ETA. Con la implementación de esta medida, se gratificaría a los agentes que cumplan servicio en territorio catalán.

La asociación, con representación en el Consejo de la Guardia Civil, ha anunciado que su petición incluye que se establezcan "beneficios personales" para los agentes, entre ellos una "gratificación" salarial o un "derecho preferente" en los posteriores traslados o promociones estipulados en el Instituto Armado por el sistema de antigüedad.

"La evolución del deterioro social que se sufre en Catalunya, especialmente desde los acontecimientos de septiembre y octubre del 2017, lejos de ir hacia la normalización, deriva a un conflicto social cada vez más radicalizado con respecto a la aceptación de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y al resto de las instituciones que representan el Estado", señala la APROGC, denunciando la "presión" que viven los familiares y el entorno de los guardias civiles, "y en algunos casos sus negocios".

Además, la APROGC pide que todo aquel agente que solicite y haya cumplido un tiempo de destinación determinada en Catalunya tendrá que ser condecorado con la Cruz del Mérito de la Guardia Civil.

El gobierno de Pedro Sánchez ha asegurado en una respuesta parlamentaria con fecha de 26 de octubre que la Guardia Civil ha perdido en Catalunya entre el 2012 y 2017 un total de 277 agentes. En el mismo periodo, la Policía Nacional ha visto disminuido su despliegue en 632 efectivos.