El impacto de la actividad política en la familia de los políticos. El president Artur Mas ha dedicado su último pódcast a una conversación con su esposa, Elena Rakosnik, en que ambos reflexionan sobre cómo se hizo sentir la actividad política en su hogar familiar y, en especial, a partir del momento en que saltó a la primera línea política como candidato de CiU al Parlament, jefe de la oposición y finalmente, president de la Generalitat, cargo que ocupó  entre el 2010 y el 2016.

La huella de la política que analizan en esta conversación no tiene nada que ver con polémicas como las que rodean a la esposa del presidente del Gobierno, a Pedro Sánchez, o la pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. El pódcast se refiere al eco cotidiano y en la vida doméstica. Por ejemplo, el impacto en la hija adolescente, que evita aparecer al lado del padre, o el hijo pequeño con quien comparte nombre y que acabó optando por firmar como Artur M. Rakosnik para evitar problemas... Mas admite que nunca podrán saber hasta qué punto acabó acondicionando a sus hijos su trabajo. "Seguro que te han tenido que defender en momentos muy complicados, ha tenido que dar la cara por ti, se han sentido dolidos por determinadas críticas, o incluso han oído impactos en los entornos escolares...", argumenta.

Conflictos durante la crisis

Todo ello, complicado por la crisis económica que estalló de lleno durante el mandato de Artur Mas, con los recortes que asumió su Govern para hacerle frente. Y, de repente, los escarnios en la puerta de casa y las estrategias para evitar tropezar con los manifestantes de vuelta al hogar. Pero el episodio que describe Mas con más aflicción es el referido a las largas y dolorosas enfermedades que sufrieron las dos hermanas, muertas en el 2011 y en el 2016, y que comportaron numerosas visitas durante aquellos años a hospitales públicos, llenos de carteles con insultos contra él por los recortes que impactaron de manera especialmente cruda a la Sanidad pública. "Íbamos por las noches para no provocar conflictos", recuerda Mas, que confiesa que fueron algunos de los momentos más duros que vivió aquellos años.

El pódcast no evita la comparación del matrimonio Mas-Rakosnik con la pareja que formaron Jordi Pujol y Marta Ferrusola, y deja claro que cada uno tiene su "estilo" y que son "muy diferentes". No obstante, Elena Rakosnik confiesa que se vio dos o tres veces en casa de los Pujol con Marta Ferrusola, que se interesó sobre cómo "llevaba" su situación como esposa del president de la Generalitat y le quiso transmitir ideas y consejos. "Escuché y después hice la mía", explica, subrayando que representaban generaciones y actitudes muy diferentes.

El pódcast acaba con recomendaciones para familias de políticos y para los profesionales de la cosa pública. A los familiares, Mas les recomienda paciencia, que no se preocupen demasiados por las críticas e incluso por los insultos. "Y que no pidan favores al político de casa. A veces cuando estás en la primera línea política hay mucha gente que te pide cosas. Eso es humano. Pero al menos, que este entorno más próximo no sea el que te diga, ahora iría bien esto o iría bien aquello", añade. Con respecto a los políticos, les aconseja comprensión con su entorno, porque "los otros no tienen ninguna culpa que tú hayas decidido dedicarte intensísimamente a la política, pero eso tiene repercusiones sobre todo el mundo".